por Leo Morales
14 Mayo de 2024 14:27El desembarco de los libertarios en Balcarce 50 y el regreso del modelo de privatizaciones e industricidio nacional volvieron a poner a la figura de Carlos Menem en la agenda local. Sin ir más lejos, Javier Milei dio un pasito más y homenajeó a su "ídolo" al descubrir un busto con su figura en el Salón de los Patriotas argentinos de La Rosada.
"Les duela o no, ha sido el mejor presidente de la historia. Si hay algo que dije siempre es que fue el mejor presidente de la historia y hoy vengo con el honor y orgullo de estar reestrenando este busto", señaló el presidente, con lágrimas en los ojos y rodeado de gran parte de su gabinete y mesa chica, en donde el apellido Menem se impone numéricamente.
Pero el recuerdo que tiene Milei de lo que fueron los noventas en la Argentina es, cuanto menos, sesgado. Una ciudad que voló por los aires, los acuerdos por la venta ilegal de armas, dos atentados terroristas y el asesinato de su propio hijo son algunos de los hitos de la administración del "Carlo" que Milei esconde bajo la alfombra. Así que abróchense el cinturón centennials, que vamos a dar un pequeño paseo titulado "Menem lo hizo".
Los atentados a la embajada de Israel y la AMIA: pasaron con Menem
La Delegación de Asociaciones Israelitas Argentinas (DAIA) compartió un comunicado horas después de la muerte del ex presidente en el que repudiaron su administración. "Muere en libertad a pesar de que su Gobierno utilizó las instituciones del Estado argentino para perpetuar la impunidad y encubrir la responsabilidad de quienes cometieron y fueron cómplices de los atentados".
"La DAIA, representación de la comunidad judía argentina, tras la muerte del ex primer mandatario Carlos Menem, expresa que durante su presidencia se produjeron los dos atentados terroristas más graves de la historia argentina. La desidia, negligencia y, sobre todo, la complicidad con los sospechosos de haber cometido esos crímenes explican por qué hoy ambas masacres siguen impunes".
La Delegación también apuntó contra los fueros que Menem tuvo hasta el último día de su vida y que lo protegieron del avance de las investigaciones judiciales. Cabe recordar que el ex presidente murió una semana antes de enfrentar el inicio del juicio por la voladura de la Fábrica Militar de Armamentos de Río Tercero ocurrida en 1995.
"Menem falleció amparado hasta el último día por sus fueros de senador que impidieron que estuviera preso. Nunca pagó por su responsabilidad en el encubrimiento del atentado contra la AMIA-DAIA. Como organización de Derechos Humanos, la DAIA tampoco olvida su indignante y triste decisión de indultar a los responsables de los crímenes cometidos durante la última dictadura militar, burlándose de la Justicia, familiares de detenidos desaparecidos y sobrevivientes", concluyó el duro comunicado.
Río Tercero, la ciudad que no lloró a Carlos Menem
La ciudad cordobesa de Río Tercero no sólo no acató los tres días de duelo dispuestos por la muerte del ex presidente, sino que además lo declaró persona "no grata", por lo cual no se permitirá la construcción de ningún monumento, homenaje, ni nada en memoria del ex presidente.
"Fue un personaje nefasto de la historia argentina. Los riotercerences tienen el convencimiento de que tuvo participación necesaria en los hechos que ocurrieron el tres de noviembre de 1995, donde hubo siete muertos y muchísimas víctimas. Más de 300 heridos, además de la destrucción de la ciudad", denunció Marcos Ferrer, por entonces intendente de la localidad cordobesa.
La semana que viene iba a comenzar el juicio por la voladura de la fábrica militar, pese a que ya transcurrieron 25 años. "Para nosotros era importante que se sentara en el banquillo, porque quiere decir que había un convencimiento de la fiscalía y de los querellantes de que él era el responsable de los hechos", sumó el intendente.
Ni olvido, ni perdón: el repudio de los organismos de Derechos Humanos por los indultos
"El de Menem fue un gobierno de vergüenza, un gobierno de odaliscas, un gobierno que parecía en joda", denunció Hebe de Bonafini, quien en el día de la muerte del ex presidente publicó un duro comunicado titulado "No lamento su muerte, ni deseo que descanse en paz".
La titular de Madres de Plaza de Mayo sostuvo en su momento: "La noticia es 'Murió Menem' y entonces empiezan a aparecer las hipocresías. Todo el mundo hablando maravillas de él. Yo comprendo a quienes tienen que recurrir a formalidades, que están muy claras y así es el juego institucional. Pero las Madres no podemos ser así. Todo era pura alabanza, pura mentira. Alguien tenía que decir algo, porque si no era como si se hubieran olvidado de lo que nos hicieron. Si no, ¿qué le estamos contando a la juventud? Se rió de los científicos, de los maestros, los mandó a lavar platos. Fue horrible para los jubilados, para todos".
"Pero para nosotras lo más grave fue el perdón a los asesinos de nuestros hijos y la persecución que hizo contra las Madres", denunció, al tiempo que recordó que durante los dos mandatos la sede de la Asociación fue robada en 11 oportunidades y se llevaron, además de objetos de valor, "carpetas enteras con fotos de policías y militares que habíamos logrado reconstruir con el tiempo".
Estela De Carlotto, presidenta de Abuelas de Plaza de Mayo, aclaró en los días posteriores a su muerte que no le guarda "ni odio, ni rencor". "Hizo muchas trampas políticas y cometió inexactitudes políticas muy perjudiciales para el país. Pero mi memoria está centrada en recordarlo bueno. En el año 1992 nos recibió a mí y a dos abuelas más en Olivos. Habíamos ido a hablar sobre la creación de una comisión estatal para buscar a los nietos. Nos trató muy bien, dijo que sí y al poco tiempo se creó la CONADI".
"Menem pasó a la historia, cada cual lo juzgará. Yo tengo el corazón abierto a la buena memoria y no a vivir con malos recuerdos que envenenan, pero sí no hay que olvidar quiénes han sido los responsables de los peores males de nuestra historia: la última dictadura cívico militar", cerró Carlotto, en diálogo con Página 12.
Taty Almeida: "Es conveniente tener memoria. Menem fue el presidente que absolvió a los genocidas, el que intentó tirar abajo la ex ESMA para hacer un 'parque de la reconciliación'. ¿De qué reconciliación hablaba? Ni olvido, ni perdón". Nora Cortiñas, por su parte, sumó: "No siento ninguna tristeza. Es una persona de la que tenemos los peores recuerdos, especialmente por el indulto otorgado a los genocidas en una etapa en la que todos queríamos toda la verdad y toda la justicia. Y la historia nos terminó dando esa respuesta".