El futuro director del INDEC, Marco Lavagna, estimó que la inflación de 2020 no bajará del 40 por ciento y elogió al actual titular del organismo, Jorge Todesca. Ayer Alberto Fernández confirmó que el economista y diputado por Consenso Federal estará al frente del organismo. Antes del traspaso de mando, el gobierno envió un proyecto de ley para “transparentar” y garantizar las estadísticas.
El hijo del ex ministro de Economía de Néstor Kirchner anticipó que la inflación anual de 2020 no será inferior al 40 por ciento, producto del “arrastre” que quedará de este año, donde el índice de precios anual se estima que trepará al 55 %. Según dijo Lavagna, hay un “arrastre estadístico de 25 puntos que provienen de este año”.
Lavagna además elogió a Todesca, y aseguró que “es un mérito que la inflación difundida sea la que realmente es y también hay que reconocer la tarea de todos los trabajadores que han logrado revertir la desconfianza”, en relación a la falta de credibilidad del organismo estadístico hasta 2015. El presidente electo, Alberto Fernández, confirmó ayer por la tarde que el actual diputado sería el sucesor de Todesca en el INDEC, y se mostró de acuerdo con “transparentar” las estadísticas.
Según el economista, la inflación puede llegar a un dígito recién dentro de tres años, aunque aclaró: “Hacia la segunda mitad del año que viene vamos a ver si efectivamente el trayecto quiebra la tendencia”.
En este contexto, antes del cambio de gobierno, el presidente Mauricio Macri y el ministro de Hacienda, Hernán Lacunza, enviaron un proyecto de ley al Congreso para garantizar la credibilidad y transparencia del instituto estadístico. La iniciativa prevé, entre otros aspectos, que el organismo tenga un director general con rango de secretario, designado por el presidente, con concurso público, acuerdo del Senado y mandato de cinco años.
Además, el proyecto propone la Creación de un Consejo del Sistema Estadístico Nacional, que será integrado por representantes de seis ministerios, el Banco Central y ocho expertos que no cobrarán sueldos, sino que ejercerán ad honorem. Por otro lado, una comisión bicameral parlamentaria deberá hacer el seguimiento de la tarea del organismo.