La flamante Agencia Federal de Inteligencia (AFI) tendrá más atribuciones y poder para espiar a los argentinos, según se desprende de la "Nueva doctrina de inteligencia nacional" que fue publicada este martes en el Boletín Oficial. Oscar Parrilli, al frente de la agencia, aclaró: “el objetivo es cuidar y no espiar a los argentinos”.
Oscar Parrilli está al frente de la ex SIDE
El documento de 408 páginas establece los lineamientos para las investigaciones y amplía el abanico de tareas que el organismo a cargo de Oscar Parrilli tendrá de ahora en adelante.
Habrá que ver que dice el Congreso, ya que la nueva normativa podría violar libertades individuales y hasta la Ley de Seguridad Interior, que dispone sobre que objetivos se puede realizar tareas de inteligencia y sobre cuáles no.
La nueva normativa establece que la AFI tendrá que prevenir cuatro tipos de delitos en el campo de la seguridad interior. El más llamativo es quizás el segundo punto, que establece que el organismo tendrá que trabajar para evitar "los atentados contra el orden institucional y la vida democrática, ya sea que se trate de grupos políticos y/o militares (...) o grupos económicos y/o financieros".
Las entidades bancarias estarán en la mira de la AFI
En este último grupo son nombrados como posibles agresores las "
empresas, bancos, compañías y financieras." Se tendrá en la mira a las instituciones que "lleven a cabo acciones tendientes a la desestabilización de gobiernos democráticos mediante corridas bancarias y cambiarias, desabastecimientos y golpes de mercado."
Surge la incógnita sobre qué ocurrirá con el decreto ante variaciones mínimas del mercado financiero, tal como la suba del precio del dólar. A su vez, nace otra pregunta. ¿Los arbolitos de la calle Florida podrían, entonces, constituirse en posibles agresores?. ¿Y los ciudadanos que ante una eventual situación como la que plantea este ejercicio, salieran a comprar dólares para proteger sus ahorros o apenas su salario, también incurrirían en este delito?.
En numerosos discursos, la presidente Cristina Kirchner denunció a los mercados e incluso a sectores empresarios por haber intentado organizar corridas bancarias en contra de su gobierno. La duda ahora es si esos sectores ya comenzaron a ser investigados o podrían serlo en un futuro no muy lejano.
Los otros tres tipos de delitos que, según el documento, ponen en peligro la seguridad interior son "el terrorismo y sus diferentes manifestaciones"; la "criminalidad organizada" en forma de narcotráfico, trata de personas o tráfico de armas y "las acciones que atenten contra la ciberseguridad".
La AFI también deberá encargarse de prevenir peligros para la defensa nacional, es decir "agresiones de origen externo perpetradas por Fuerzas Armadas", según establece el capítulo I de la "Nueva doctrina de inteligencia nacional".
Escuchas telefónicas
Desde hoy también hay otra novedad vinculada con la ex SIDE. La Oficina de Observaciones Judiciales, encargada de pinchar teléfonos por orden judicial, pasó a depender de la Procuración General de la Nación.
La fiscal Cristina Caamaño fue designada para hacerse cargo del área dentro de la Procuración General que llevará adelante las escuchas judiciales. Asseguró que el sistema funcionará “con transparencia” centralmente porque “deja de ser un área de inteligencia” para pasar a ser “una prestación más” al servicio de las investigaciones que realizan los fiscales.
“Va a ser parte de una dirección más amplia, que es la Dirección General de Apoyo a las Investigaciones Penales y, dentro de esa dirección, hay muchas prestaciones que se dará a los fiscales a partir de la implementación del nuevo Código Procesal Penal el 1 de marzo del 2016”, aseveró Caamaño.