por Gonzalo Prado
13 Octubre de 2020 14:11Las palabras del ex presidente Mauricio Macri contra el ex ministro de Interior, Rogelio Frigerio, y el ex presidente de la Cámara de Diputados, Emilio Monzó, estuvieron lejos de pasar inadvertidas. Es que, junto con la cuasi nula mención al jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, el ex presidente apuntó directo al sector más dialoguista de Juntos por el Cambio.
“Yo la delegué en mi ala más política con filoperonistas tanto en la Cámara de Diputados y los gobernadores; yo tendría que haber puesto el foco ahí porque claramente se jugaba mucho en la Argentina en poder convencer”, dijo ayer Macri durante una entrevista que le dio al canal de noticias TN en lo que fue su primera aparición mediática en Argentina desde que dejó el poder el 10 de diciembre de 2019.
Macri repartió críticas: "El peronismo está secuestrado por Cristina Kirchner hace 10 años"
La primera reacción que tuvieron tanto Monzó como Frigerio fue, según pudo reconstruir BigBang, considerar que las declaraciones fueron un pase de facturas por la última entrevista del ex presidente de la Cámara de Diputados sobre la necesidad de “jubilar” a Macri. “No le debe haber gustado que Emilio dijera que Mauricio tiene que correrse de la escena político electoral, comportarse como un expresidente y alentar a la construcción de una generación nueva”, analizó uno de los allegados a Monzó.
“Lo dije para Cristina en su momento, y para Macri en este momento. Nos cuesta mucho en nuestro país hacer un cambio generacional definitivo. Creo que Cristina y Macri tienen que ser una etapa terminada”, había sostenido Monzó en septiembre durante una entrevista con el sitio Infobae.
Esa declaración, sabe el ex presidente de la Cámara de Diputados, caló hondo en Macri. A eso se le suma el acercamiento que logró el alcalde porteño entre la ex gobernadora de la provincia de Buenos Aires, María Eugenia Vidal, y Monzó quienes estaban enfrentados desde la campaña de 2015.
Si bien juegan en tándem desde hace mucho tiempo, Frigerio tomó también de otra forma lo dicho por Macri. “Rogelio viene pidiendo y haciendo autocrítica cada vez que sale en los medios. Nunca fue crítico con Mauricio. Pero fue el primero en hablar de liderazgos horizontales allá por abril/mayo”, expresaron desde su entorno.
Esa horizontalidad es lo que, según remarcan, impediría la ruptura que algunos profesan. “Es muy simple, la gente cuando llegue el momento elegirá en las urnas con qué sector de Juntos por el Cambio se siente más cómodo”, afirman vaticinando una interna electoral. Sin embargo el enojo por las declaraciones existe. “Si todos salimos a decir en on lo que pensamos de los errores que cometieron otros, no hay unidad de Juntos por el Cambio. Por eso no suma”, agregó la misma fuente.
Aunque ambos, por ahora, decidieron no hacer declaraciones públicas al respecto, quien sí salió a responderles fue el diputado nacional y "monzonista" Sebastián Garcia de Luca. “Gracias a Monzó y Frigerio logramos tener las leyes más importantes y construir gobernabilidad durante los cuatro años de gobierno con enorme minoría legislativa y estructura política”, aseguró.
“Rogelio y Emilio lograron convencer a Pichetto (Miguel Ángel, senador) para que sea el compañero de fórmula en la última elección. Como en 2014 con la Unión Cívica Radical y Carrió (Elisa), a pesar de las resistencias internas en el PRO para conformar Cambiemos”, remarcó el diputado nacional en una declaración enviada a diferentes medios.
A la par, desde ese sector se encargaron de armar un video que rápidamente se volvió viral en donde se encuentran varias de las frases de los dirigentes, como Patricia Bullrich, Pichetto y Carrió, con los que Macri se muestra cercano.
Ni Monzó, ni Frigerio romperían filas en Juntos por el Cambio. Pero no obstante ello la bronca existe. “La única delegación de la política y la economía que hizo Macri fue a la jefatura de Gabinete, con Marcos Peña, y a la Secretaria General, con Fernando De Andreis”, replicó uno de los ex funcionarios que tenía despacho en la Casa Rosada.Por fuera de eso existe otra arista detrás de las declaraciones de Macri y que, puertas adentro, empezaron a generar cuestionamientos al entendimiento de la realidad política del país. De cara a las elecciones de medio término, en donde Juntos por el Cambio tendrá que defender una buena cantidad de bancas y sobre todo en Diputados, empieza a agitar el fantasma de la divisiones. "No hay que olvidarse que si no damos la imagen de estar unidos se fortalecen los antipolítica como Espert y Milei", empiezan a advertir desde Uspallata.
El hecho de que Macri casi no mencionara a Rodríguez Larreta tampoco fue menor. Si bien mantiene diferentes vínculos con el ex presidente, el alcalde porteño tiene otra forma de hacer política más cerca del centro que es algo que Macri, por estas horas, busca evitar. “Sólo con Macri no se puede; sin él, tampoco”, replican una y otra vez los armadores del jefe de Gobierno. El rol del vicejefe de Gobierno, Diego Santilli, será clave en la contención posterior a las declaraciones del ex presidente.
Sin embargo, Macri también le dedicó algunos dardos durante la entrevista a una de las personas más cercanas a él: el propio Peña. La sola mención de que fue un error no hacer público el diagnostico de como sostenían que habían recibido el Gobierno el 10 de diciembre de 2015 fue una de las banderas del ex jefe de Gabinete hasta mediados de 2018.
Fue él, junto al consultor ecuatoriano Jaime Durán Barba, el que profesaba que no era necesario ese diagnostico y que el macrismo debía centrarse en la “buena onda” y “esperanza” que consideraban en ese entonces era la clave de la administración macrista.
Dady Brieva estalló por la marcha contra el Gobierno: "Unas ganas de agarrar un camión y..."
Esa frase, junto con la sorpresa de la autocrítica que realizó el ex presidente, no pasó desapercibida y generó tanto ruido interno como los dardos hacia Monzó y Frigerio. ¿Pase de factura por las charlas entre Peña y Rodríguez Larreta?