En un gesto que promete resonar en el escenario político nacional, el Partido Justicialista (PJ) Bonaerense, con Máximo Kirchner a la cabeza, celebrará este lunes una cumbre en la reserva municipal Los Robles del partido de Moreno. La reunión contará con la presencia de Cristina Fernández de Kirchner, Sergio Massa y Axel Kicillof, marcando un reencuentro de las principales figuras del peronismo en medio de un clima político cargado de tensiones y desafíos. El encuentro tiene como eje la presentación de un informe del bloque legislativo provincial y un análisis de la situación política actual a nivel nacional.
Según confirmaron, tanto la ex presidenta como el ex candidato presidencial Sergio Massa estarán presentes. Kicillof, por su parte, también confirmó su asistencia, aunque advirtió que será breve debido a compromisos en su agenda. "Voy a pasar porque fui invitado. Es una reunión del Consejo del PJ Bonaerense, y aunque no soy consejero, quiero estar presente", señaló el gobernador, quien además conmemora hoy los cinco años de su gobierno en la provincia de Buenos Aires.
El acto en Moreno refuerza la alianza entre Cristina Kirchner y la intendenta local, Mariel Fernández, una de las vicepresidentas del PJ nacional. Esta relación subraya el control estratégico que la ex mandataria mantiene en el territorio bonaerense, considerado clave para el futuro político del peronismo. El evento de hoy también sirve como antesala para un hito significativo: Cristina Fernández asumirá formalmente como presidenta del PJ nacional el próximo miércoles.
Lo hará en un acto que se realizará en la sede de la Universidad Metropolitana para la Educación y el Trabajo (UMET). Este rol consolida su liderazgo en el partido y abre interrogantes sobre cómo influirá en las dinámicas internas y la oposición al gobierno de Javier Milei. Cabe recordar que la última visita de la ex mandataria a Moreno fue el 13 de noviembre, un día después de que la Cámara de Casación Penal confirmara su condena a seis años de prisión e inhabilitación perpetua para ejercer cargos públicos.
En paralelo a la cumbre del PJ, Kicillof hizo un enérgico pronunciamiento contra una posible privatización de Aerolíneas Argentinas, deslizando incluso que su administración podría asumir el control de la compañía en caso de que el gobierno nacional decidiera venderla. "Si quieren vacar o vender Aerolíneas Argentinas, la Provincia no lo va a permitir", afirmó el gobernador y subrayó la importancia de la aerolínea como herramienta estratégica para la conectividad y el desarrollo económico.
Según sus cálculos, la actividad de Aerolíneas generó 2.665 millones de dólares en beneficios para la provincia y sostiene 81 millones de empleos directos e indirectos. Además, Kicillof dejó claro que, de ser necesario, iniciará un diálogo con trabajadores y gobernadores para garantizar la continuidad de la tubería bajo un modelo estatal. "La patria no se vende", concluyó, marcando un límite claro al proyecto de privatización que evalúa el presidente Milei.
Finalmente, el gobernador bonaerense remarcó que Aerolíneas "es un instrumento central para la conectividad de la Argentina, es una fuente de ingresos y de bienestar inconmensurable". "La Provincia sí la quiere. Esto requiere una serie de pasos institucionales, hoy expresamos la vocación de empezar a dar los pasos. Si hay una intención de transferir, nosotros empezamos el camino de diálogo con los trabajadores y con gobernadores que la necesitan tanto", indicó y cerró: "Nos dio un saldo positivo de 2.665 millones de dólares; o sea, la comparación de con o sin AA, a la Provincia le cuesta 2.665 millones de dólares. Además genera 81 mil empleos directos e indirectos".