04 Agosto de 2020 11:18
Este martes el Ministerio de Economía, a cargo de Martín Guzmán, anunció que se alcanzó un acuerdo con los bonistas extranjeros por la reestructuración de la deuda. El rumor, sin confirmación durante lunes, hizo que las acciones y bonos de empresas argentinas que cotizan en la bolsa de Nueva York se disparen en su valor.
El acuerdo final, del que resta conocer (al cierra de esta nota todavía no hubo confirmación oficial) la palabra de los grupos de acreedores ante los cambios legales propuestos por el Gobierno (ya que en la parte económica hay un acuerdo) establece que la Argentina pagará, en promedio USD 54,82 por cada USD 100 reestructurados con una tasa de interés que variará entre el 10 y el 12 por ciento, que comenzará a pagar vencimientos a partir de marzo del año que viene, y que el grueso empezará a correr a partir de 2024. El ahorro final calculan en Economía que es de USD 38.000 millones.
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La letra final, en cuando a la cifra económica, se acerca mucho más a los que pretendían los acreedores que a lo que ofreció en un primer momento el ministro Guzmán. De USD 60 por cada USD 100 cuando conversaron las negociaciones semanas antes del impacto de la pandemia del coronavirus (Covid-19) Argentina ofreció USD 39 con plazos mucho más largos, el no pago de capital o interés durante cinco años, y una tasa de salida mucho menor.
Ahora bien, con el acuerdo casi consumado: ¿qué cambia para el país al salir del default?
El economista Gabriel Caamaño, especialista en macroeconomía y jefe de la consultora Joaquín Ledesma & Asociados analizó que “pasan dos cosas que oxigenan y reducen el nivel incertidumbre en el corto plazo: primero, la administración a cargo cierra por las buenas lo que planteó inicialmente como el primer nudo a resolver y puso en el centro de su primer tramo en la gestión. Segundo: se despeja el temor de una resolución irracional". En este sentido, Caamaño indicó que hubiera sido un "dato muy negativo para los agentes respecto de como decisiones el ejecutivo, sobre todo después de algunos embates recientes. Todo esto más allá de como se dio todo el proceso que también juego en ambos sentidos”
“Hubo un desgaste político importante de varias figuras del gabinete detrás de esta negociación, porque se fijó una expectativa errónea de querer fijar precedentes y se terminó en línea con lo que buena parte del mercado preveía y veía como posible acuerdo. Es un buen acuerdo en términos económicos y financieros. Descomprime financieramente los próximos cuatro o cinco años”, agregó Caamaño, que consideró que el acuerdo tiene que ser acompañado por una normalización fiscal y un esquema monetario consistente.
Por su parte, el ex viceministro de Economía y jefe de la consultora PxQ, Emmanuel Álvarez Agis, afirmó que “Macri le dejó a Argentina una mochila de deuda que pesaba 100 kilos, hoy lo que hizo el gobierno es que pese 54,8 kilos y nos la tengamos que poner recién en 2025”. En este sentido, consideró que la Argentina "comenzará a vivir un buen momento a partir de ahora". "Probablemente, los dólares paralelos bajando y las reservas del Banco Central creciendo para gastar sin culpa. La situación actual pide a gritos que ampliemos el Ingreso Familiar de Emergencia y que el Gobierno sea más generoso con el paquete para combatir el COVID-19, y a partir del año que viene sí debiera darse una estrategia de crecimiento que sea sostenible por el lado externo”, agregó.
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En su análisis, Álvarez Agis, consideró que, aun cuando resta terminar de negociar con los bonistas locales y con el Fondo Monetario Internacional (FMI), el acuerdo le permite al Gobierno “poder gastar sin culpa” y que Guzmán le dejó la cancha a Kulfas (ministro de Desarrollo Productivo) para que pueda trabajar sector por sector” diferentes planes de recuperación.EX FUNCIONARIOS DE MACRI, A FAVOR DEL ACUERDO
El ex ministro de Economía del último tramo del gobierno de Mauricio Macri, Hernán Lacunza, celebró el acuerdo con los bonistas privados, al que calificó como "ecuánime y razonable". Dijo que un arreglo era "necesario, porque la alternativa del default era caos y pobreza", e indicó que "sin quitas (solvencia), baja, intereses y oxigena plazos (liquidez)". De todos modos, señaló que es un punto de partida y no uno de llegada. "El futuro depende de la hoja de ruta", sostuvo.Además, sostuvo que "es lógico celebrar el acuerdo". "Mañana, los mismos desafíos de los últimos 45 años: sustentabilidad fiscal, moneda local de ahorro, integración equilibrada al mundo. Uno menos: el riesgo del default. Y uno más: la pandemia", sintetizó.
Gran acuerdo!Felicitaciones al Presidente @alferdez, al ministro @Martin_M_Guzman y a todos los involucrados.Ojalá esta pesadilla de pandemia termine pronto y comience el proceso de recuperación económica que tanto necesita la gente!
- totocaputo (@totocaputo6hb) August 4, 2020
El anuncio de acuerdo para la restructuración de la deuda con los tres principales grupos de bonistas es una muy buena noticia. (1/7)
- Guido Sandleris (@gsandleris) August 4, 2020Por su parte, el ex titular del Banco Central durante el macrismo, Guido Sandleris, también celebró el acuerdo y consideró que "es una muy buena noticia". "El anuncio de acuerdo para la restructuración de la deuda con los tres principales grupos de bonistas es una muy buena noticia", indicó. "Resuelve este problema que tiene mucho que ver con la incertidumbre que genera la falta de consensos económicos, postergando vencimientos y reduciendo la tasa de interés de los cupones", remarcó Sandleris.
