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La CGT se planta: "Es improbable un veto a la ley de ganancias"

Héctor Daer, secretario general de la central obrera y dirigente massista, dijo que era "una derrota política del oficialismo" el regreso de las retenciones a las mineras.

09 Diciembre de 2016 07:50
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El Secretario General de la CGT, Héctor Daer, le "marcó la cancha" al Gobierno, en relación con un posible veto presidencial a la reforma del impuesto a las ganancias que ya cuenta con media sanción por parte de la Cámara de Diputados.

En diálogo con Ari Paluch y Claudio Zlotnik en Fm Latina, Daer señaló, "Nosotros no queremos poner en agenda la discusión del veto. Para nosotros es totalmente improbable en términos políticos e institucionales un veto de estas características sobre un tema que en estos momentos tiene un apoyo político e institucional importante. Seguramente esto transitará el Senado y veremos cómo va en la Cámara de Senadores, pero no queremos discutir el veto".

Héctor Daer, Secretario General de la CGT.

"Nosotros planteamos que se compense con otros tributos la pérdida de ingresos fiscales. Aparte va a haber inflación, va a haber incrementos salariales producto de las paritarias, con lo cual el número final de la ecuación no está distorsionado. De última el Gobierno, lo que tendría que haber visto o previsto es que la realidad de los trabajadores era esta. No se puede seguir aumentando la cantidad de trabajadores afectados por este impuesto, cuando históricamente fue el 10 por ciento", subrayó.

Massa y Graciela Camaño, artífices de la reforma al impuesto a las ganancias.

"Con el proyecto del oficialismo el aumento del mínimo no imponible era del 15 por ciento e iban a pagar 500 mil personas más", cuestionó Daer, que además de su cargo en la CGT es dirigente massista. "Sí a mí me dicen que es una derrota política del oficialismo que uno le haya restituido las retenciones a las mineras, puede ser...", ironizó.

"Me parece que lo que no hay que hacer es salir a agredir a todo el mundo, me parece una aberración porque la nave sigue, hay que seguir gobernando, las personas a las cuales el presidente direcciona estos adjetivos confluyen en una mayoría parlamentaria. El problema de fondo es que el país no pega la vuelta, no hay un punto donde decimos 'Hasta acá llegamos y empezamos a crecer' y no se le puede echar la culpa a un proyecto como este", concluyó.