31 Enero de 2024 13:50
El tratamiento de la Ley Ómnibus que impulsa el gobierno del presidente Javier Milei, que tantos dolores de cabeza generó en las negociaciones del oficialismo, llegó al Congreso Nacional, donde prevén que pueden llegar a haber 50 horas de debate. De cara a las protestas que ya rodean la zona, las fuerzas de seguridad federales, a pedido de la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, lanzaron un fuerte operativo que rodeó el recinto. Desde la Confederación General del Trabajo (CGT) se pronunciaron contra la disposición represiva.
"Si para la discusión parlamentaria se debe militarizar el Congreso de la Nación, es sensato sospechar sobre los supuestos 'beneficios' para el pueblo de la Ley Ómnibus", escribieron desde la cuenta oficial de Twitter de la CGT, en un mensaje cargado de sarcasmo respecto a la necesidad de convocar a tantas fuerzas represivas para tratar un proyecto parlamentario. La publicación estuvo acompañada de un video de cuando las tropas de la Gendarmería Nacional Argentina (GNA) se desplegaban.
La central obrera viene de realizar el primer paro general al gobierno libertario el 24 de enero, a 44 días de su asunción. Allí además realizaron un acto frente al Congreso en el que hablaron los triunviros Pablo Moyano y Héctor Daer, con una movilización enorme de todo el acto opositor al proyecto libertario, que acompañó la medida.
La protesta contra la Ley Ómnibus
La oposición al proyecto que busca modificar 386 artículos de una veintena de leyes, ya comenzó a concentrarse en las cercanías del recinto. Si bien la convocatoria que unifica a organizaciones sociales, de derechos humanos, de la cultura, estudiantiles, de sindicatos combativos, asambleas barriales y partidos de izquierda, es en parte a partir de las 16, lo apremiante de la situación ya consiguió que la manifestación comience antes de horario.
Al mismo tiempo, el Congreso Nacional se encuentra completamente rodeado por personal antidisturbios de la GNA y la Policía Federal Argentina (PFA), especializados en represiones. A su vez, en la zona están dispuestos camiones hidrantes y motos y camionetas de asalto, apostadas sobre la calle Ayacucho, además de en la intersecciones de las avenidas de Mayo y 9 de Julio y, por otro lado, Belgrano y Entre Ríos.
La idea de la manifestación es realizar una "vigilia de necesidad y urgencia" -tal como fue convocada por la Multisectorial Federal de la República Argentina- que dure lo que lo haga el tratamiento de la Ley Ómnibus, que a ojos de los más optimistas puede llegar a ser de 30 horas, mientras que los más pesimistas hablan de 50.
El empresario anónimo que cruzó a los diputados
El tratamiento que comenzó a las 10:29 de este miércoles, ya dejó suficientes perlitas como para graficar la lucha parlamentaria que sucederá en las próximas horas en el Congreso Nacional. La nota la dio particularmente un empresario que no quiso decir su nombre, pero que se encontraba en las tribunas de la Cámara Baja.
"Es un empresario que vino a apoyar la ley", confirmaron al diario La Nación desde el oficialismo. Este sujeto, de lentes y remera gris, primero tuvo un cruce con el diputado nacional Mario Manrique de Unión por la Patria (UP), a quien increpó efusivamente. "Yo estoy hace una hora esperando que empiece, ustedes son empleados nuestros y digo lo que quiero", le espetó al legislador.
Este ataque generó que el también sindicalista del Sindicato de Mecánicos y Afines del Transporte Automotor (SMATA) suba hacia donde se encontraba el supuesto empresario y mantuviera un tenso cruce de palabras.
Luego de increpar al diputado, también atacó a Myriam Bregman del Frente de Izquierda y de los Trabajadores Unidad (FIT-U). A la abogada la insultó particularmente, lo que motivó el reclamo de su bancada y, posteriormente, la decisión del presidente de la Cámara Baja, Martín Menem, quien debió pedirle a la seguridad que lo expulse del lugar.