12 Noviembre de 2017 14:00
La aplastante victoria de Cambiemos a nivel nacional en las últimas elecciones legislativas y la derrota en territorio bonaerense de Cristina Kirchner no hicieron más que envalentonar a Mauricio Macri, quien ya sueña con el “ticket dorado” para ganar en dos años las presidenciales y quedarse en el poder hasta el 2013.
El plan de Macri es ir por la reeleción en 2019 y quedarse en el poder hasta el 2023.
Aunque desde el Gobierno todavía no se animan a confirmar una eventual candidatura, el runrún que se impone en los pasillos de La Rosada es sólo uno. No sólo Macri buscará la reelección, sino que lo hará de la mano de Lilita Carrió, quien tras su victoria en la Ciudad ya comenzó a coquetear de modo público con una candidatura del presidente.
Lo que hasta ahora eran sólo rumores se terminó de confirmar durante una cena que ofreció Jack Rosen, presidente del Congreso Judío Americano, en su mansión ubicada frente al Central Park de Nueva York. Fue allí que, según consigna el diario Clarín, el mandatario argentino le confió a los presentes su intención de buscar la reeleción.
Confesó su ambición durante una cena de gala en Manhattan.
“Mi proyecto es de continuidad. Me quedan seis años de gobierno”, aseguró Macri ante banqueros, ejecutivos de empresas y financistas estadounidenses. Su plan para lograr prolongar su estadía en Balcarce 50 es llevar adelante las medidas más polémicas entre este año y principios del que viene, con el objetivo de llegar al 2019 alejado de las críticas y con una economía en recuperación.
En efecto, el presidente mantendrá el jueves una segunda reunión con gobernadores para avanzar con el paquete de medidas que incluye reformas tributarias, laborales y judiciales. La primera, según sus propias palabras, fue “muy buena”. “Sobre algunos aspectos estuvimos de acuerdo todos, porque sabemos que es necesario deshacernos de esos impuestos que hoy nos impiden crecer más rápido y crear más empleo. Otros temas generaron más debate y son una invitación a seguir trabajando juntos”, reconoció en su última misiva enviada al diario La Voz del Interior.
La apuesta de Macri: Vidal y Larreta irán por sus propias reeleciones en Provincia y Ciudad.
En la misma carta, Macri repitió un concepto que había dicho en aquella cena en Manhattan: “Reformismo permanente”. “Ya no hay por qué tenerle miedo a transformar todo aquello que se puede mejorar. A eso nos referimos cuando hablamos de 'reformismo permanente', hablamos de quitar trabas, simplificar trámites, reducir impuestos, seguir bajando la inflación. Es generar confianza para que sea más fácil que cada argentino llegue ahí adonde quiere llegar”.
Con Carrió como vice, la apuesta de Macri es repetir fórmulas. María Eugenia Vidal se quedaría en la provincia de Buenos Aires, mientras que la directiva para Horacio Rodríguez Larreta es buscar la reeleción en la Ciudad. Sólo resta saber qué pasará con Gabriela Michetti y qué lugar ocupará en el nuevo esquema electoral con el que ya sueña Cambiemos.