El gobierno de María Eugenia Vidal no tiene dudas: el paro de 48 horas que llevan adelante los docentes en la provincia de Buenos Aires se debe al comienzo de la campaña electoral y no únicamente a la discusión paritaria que busca recuperar el poder adquisitivo perdido por los salarios.
La mitad del gabinete bonaerense que negocia con los gremios de maestros repasa y difunde los datos del historial de paros docentes en el territorio más importante del país.
La primera conclusión es que Buenos Aires marca el pulso de la conflictividad en las aulas. Por la cantidad de alumnos (3 millones y medio) y de docentes (260 mil) es la provincia que más impacta en el calendario nacional.
Villegas, Lacunza y Finocchiaro, los ministros de Vidal en la negociación.
En los últimos 15 años, las huelgas de SUTEBA, la FEB, UDOCBA y SADOP en el territorio que ahora gobierna Vidal fueron casi siempre superiores a los paros docentes decretados por CTERA a nivel nacional. Sólo 2002 y 2009 fueron la excepción.
De acuerdo a los datos de la gobernación, entre 2002 y 2016 hubo 85 días de paro en la provincia de Buenos Aires contra 42 -menos de la mitad- a nivel nacional.
Pero además, los ministros de la gobernadora afirman que las huelgas siempre son más en los años electorales: algo que no siempre se corrobora, aún si se toman en cuenta los datos que maneja Vidal.
Desde 2002, el Frente Gremial Docente hizo paro todos los años, salvo en 2015.
Entre 2005 y 2016, los paros de maestros se repitieron año a año. En 2009 -cuando Néstor Kirchner perdió ante Francisco De Narváez- hubo 6, en 2011 -con la reelección de Cristina Kirchner- hubo 5 y en 2013 -con el triunfo de Sergio Massa- hubo 12.
Sin embargo, en los años pares las jornadas de huelga fueron iguales o superiores. En 2010, hubo 8; en 2012, hubo 12; y en 2014 hubo 17 días de paro del Frente Gremial Docente contra Daniel Scioli.
La explicación de Cambiemos es que los paros contra el ex gobernador bonaerense estaban fogoneados por el kirchnerismo que lo resistía como candidato a Presidente.
La gobernadora, convencida de que el paro es "político".
Sólo en 2015, afirma el macrismo, Roberto Baradel y el resto de los gremios sacaron el pie del acelerador y no hicieron huelga, lo mismo que en 2016, el primer año del gobierno de Vidal, cuando la Nación y la provincia ofrecieron juntas para los maestros un incremento del 34,6 %.
¿Los paros en la provincia aumentan en los años electorales? ¿O confirman que existe un problema estructural que se repitió durante los años del kirchnerismo de Scioli y el macrismo de Vidal?