El actual presidente Mauricio Macri era jefe de Gobierno porteño en 2013 cuando advirtió cómo en los pasillos de Talchahuano 550 avanzaba a paso firme una mega investigación contra los miembros de la barra brava de Boca, conocida como "La 12". La gran mayoría de la comisión directiva del club xeneixe era parte de su histórico armado, que comenzó con su llegada a la presidencia de la institución en 1996.
La barra de Boca en uno de los últimos partidos del club.
El juez Manuel De Campos junto con el fiscal Andrés Madrea llevaban adelante la investigación contra la barra, que fue conocida como “la mega causa” de La Doce. Luego de las amenazas al jefe de la Policía Federal en ese entonces, Román Di Santo, la pesquisa giró hacía el rol que tenía el jefe de Seguridad del club, el fiscal federal Carlos Stornelli.
Stornelli junto al presidente de Boca, Daniel Angelici.
Madrea, que llevó adelante entre otras la investigación por el derrumbe del boliche Beara donde murieron dos chicas, fue uno de los impulsores de la pesquisa para que se comenzara a ver el papel de Stornelli en todo el entramado de la barra.
En una serie de escuchas que se realizaron en la causa, a lo que se le sumó evidencia incautada, cuentas con transferencias verificadas entre otras cosas, quedó el registro de como Stornelli le levantaba el derecho de admisión a la Bombonera a la barra de Boca e incluso mantenía diálogos fluidos con el organismo encargado de impartir el control a las hinchadas en la provincia de Buenos Aires, el Aprevide, para conseguir algunos beneficios para la 12.
Rafael Di Zeo y Mauro Martín, los líderes de la barra de Boca.
El dato no es menor ya que el fiscal fue ex ministro de Seguridad de esa provincia entre 2007 y 2010 en la gestión del ex gobernador Daniel Scioli. Y como tal era la persona encargada del Aprevide. Estas evidencias, sumadas a otras más que constan en la causa, fueron el detonante para que Madrea busque impulsar el pedido de citación indagatoria a Stornelli en la causa por sus probados vínculos con la barra.
Esto incluso de vio plasmado durante una entrevista en donde el entonces jefe de la 12, Rafael Di Zeo, pidió un minuto para hablar por celular con dicho fiscal y hasta se jactó de sus contactos.
Durante el diálogo en un bar, donde Di Zeo (con una fuerte custodia barra) era entrevistado por el periodista Jon Sistiaga, de un canal español, se generó una interrupción. Era el teléfono de Di Zeo. El periodista relata el hecho de la siguiente manera : “Él interrumpe la charla. Tiene una llamada que contestar. Es Carlos Stornelli, Director de Seguridad de Boca, también fiscal, también ex Ministro de Seguridad. Di Zeo me muestra la pantalla complacido, demostrando su influencia o su nivel de contactos. A él que tiene prohibido el ingreso al campo de juego lo llama el jefe de Seguridad del club”.
El ex secretario de Seguridad, Sergio Berni, fue uno de los funcionarios que denunció lo que sucedía en la causa.
En 2014 la causa comenzó a naufragar. Madrea había sido designado en un principio ante la falta de fiscalías que llevarían adelante la investigación junto con el juez De Campos. Para removerlo se le sacó la investigación a su dependencia y se puso un consejo de fiscales que terminaron por darle mucho menos impulso. Un año después el magistrado fue apuntado también y quedó afuera.
Stornelli nunca fue citado y todas las miradas, incluso la del ex secretario de Seguridad, Sergio Berni, estuvieron puestas sobre el posible accionar del presidente de Boca y uno de los operadores judiciales de Cambiemos, Daniel “Tano” Angelici.