La Justicia finalmente rechazó el pedido de desalojo de la estancia Casa Nueva solicitado por el el exministro de Agroindustria Luis Miguel Etchevehere y los fiscales Oscar Sobko y María Constanza Bessa. Se trata del predio que desató una feroz interna familiar, ya que Dolores Etchevehere cedió el 40 por ciento de sus tierras para el desarrollo de un proyecto agroecológico que lleva adelante la Unión de Trabajadores de la Economía Popular, que lidera Juan Grabois.
El fallo del juez de Garantías subrogante Raúl Flores rechaza el desalojo solicitado por los fiscales y la defensa de Luis Etchevehere, el ex presidente de la Sociedad Rural y exministro macrista que mantiene una fuerte interna con su hermana, luego de denuncias que ella presentó a la Justicia en los últimos años por estafas en la sucesión de los bienes de su padre e irregularidades en la administración de las propiedades y campos.
La decisión de Flores será apelada por Luis Etchevehere ante el Tribunal de Juicio y Apelaciones de Paraná. En el fallo, el juez Flores precisó que la documentación presentada por Dolores Etchevehere acreditaba que tenía derecho como heredera debido a que en el expediente del juicio civil en el que terminó la sucesión en trámite no se había procedido a la partición de todos los bienes tras la muerte de su padre años atrás.
Según el juez de Garantías, a Dolores Etchevehere “le asiste razón a la defensa en cuanto a que, por todos los bienes existentes los hermanos son condóminos y dueños por igual, hasta que culmine el sucesorio”. En este aspecto, agregó que se “aduce que la disputa familiar-hereditaria por la titularidad y/o posesión y goce del inmueble no puede ser resuelto en sede penal - por estar claramente confundidos los verdaderos dueños del campo presuntamente usurpado”.
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En este sentido, el juez aclaró que el ingreso al campo por parte de integrantes de la Unión de Trabajadores de la Economía Popular (UTEP) “no fue violento”. “Fue pacífico y sin violencia, por haberse atravesado el guarda-ganado para ingresar al campo desde la ruta, que permanece abierto y sin obstáculos al libre acceso, a la par de haberse descartado el uso de cualquier tipo de armas en las denunciadas amenazas permite descartar el hecho típico de la violencia en la usurpación del inmueble”.
Además, remarcó que las 40 personas que ingresaron lo hicieron junto a Dolores e insistió en que no existen pruebas de que hubieran cometido actos violentos. La hermana del exministro macrista, que en varias ocasiones denunció a Luis Miguel por diversos delitos en el pasado, le cedió el 40 por ciento de sus tierras a la UTEP para que desarrollen el Proyecto Artigas, una iniciativa de producción agroecológica de alimentos.
Esa decisión desató la furia de sus hermanos, con quienes mantiene la disputa judicial desde hace tiempo. Luis Miguel, de hecho, llamó a ruralistas vecinos de Entre Ríos a movilizarse a las puertas de la Estancia Casa Nueva para exigir la salida de los trabajadores.
Este viernes, luego de que se conociera el fallo, Luis Etchevehere instruyó a sus abogados para que apelen el fallo del juez Flores y se quejó de que el magistrado no tenga “conocimiento técnico en derecho penal” y que “en vez de dictar el desalojo haya recomendado a los hermanos que tengamos una reunión y nos reconciliemos”. “Esto no es una discusión familiar, es un delito penal realizado por un grupo de 40 personas”, insistió.
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El caso generó un revuelo en una provincia donde los hermanos hombres Etchevehere tienen un amplio poder político y económico. Esta semana, Dolores describió a Luis Miguel como una “persona violenta, que lo primero que piensa es en una patota para presionar”. “Es una persona que pierde el control y trata de convencer a otras que no tienen nada que ver en este conflicto, ¿qué les molesta, que una mujer quiera ejercer sus derechos? ¿Por qué tienen que hacer tanto teatro como lo hacen porque son ridículos?