La Justicia tiene en la mira a las hijas de José López, sobre quienes realizará una investigación patrimonial en el marco de la causa por enriquecimiento ilícito contra el ex secretario de Obras Públicas. En concreto, un contrato de alquiler en Recoleta con un proveedor del Estado durante el kirchnerismo las complica.
Ahora la Justicia investigará el patrimonio de las hijas de López.
Ante un pedido de la Sala II de la Cámara Federal, el fiscal Federico Delgado le solicitó al juez federal Daniel Rafecas que “amplíe la investigación de los bienes” de Mariana Soules y Araceli López, hijas del ex secretario de Obras Públicas.
Los millones que López intentó ocultar en un convento de General Rodríguez.
En ese sentido, Delgado pidió levantar el secretario bancario y fiscal de las dos nuevas imputadas y le requirió a Rafecas que le solicite a la Unidad de Información Financiera (UIF) un informe sobre sus bienes, según consignó el diario La Nación.
Un alquiler, la clave
La Justicia sospecha de varios alquileres en un edificio ubicado en la avenida Las Heras al 2000, en el barrio porteño de Recoleta. La familia López llegó a ocupar cuatro unidades de ese mismo edificio, a través de alquileres con distintos dueños. Sin embargo, el modus operandi tendría el objetivo de ocultar la propiedad de los mismos.
La familia de López ocupó cuatro unidades de un mismo edificio.
En particular, la Cámara pidió investigar un departamento que figura a nombre de una empresa que obtuvo varios contratos durante el kirchnerismo. Se trata de la unidad 13° B, donde vivió Soules.
La joven le alquiló el inmueble a la empresa Marketing y Eventos, que pertenece a Carlos Gianni y Marcos Marconi, empresarios con estrechos lazos con el poder en los años “K”. Entre otros, organizaron la Feria de Infraestructura y Servicios (Ferinse), celebrada en Costa Salguero en 2009 y realizaron stands en Tecnópolis.