25 Abril de 2018 17:43
La gobernadora de Buenos Aires, María Eugenia Vidal, mediante el ministro de Seguridad, Cristian Ritondo, presentó un proyecto de ley para aumentar las regulaciones de tránsito para ir a fondo contra los motochorros. El proyecto que lleva la firma del diputado provincial y presidente de la comisión de Seguridad, Matías Ranzini, y su par Carolina Píparo que en 2010 perdió a su hijo, Isidro, producto de una salidera bancaria.
Entre los puntos claves del proyecto se encuentran: la identificación con chaleco y con la inscripción de la patente de la moto en el casco. Además, cada municipio tiene un plazo de hasta 45 días para enviar al Ministerio de Seguridad el diseño geográfico y los horarios para establecer zonas de prohibición o exclusión de la circulación de dos personas en una misma moto. Cumplido ese plazo será Ritondo el que establezca estas zonas.
El anuncio de la ley contra los motochorros
El Gobierno nacional, a partir del Decreto 171/2017, estipula que cada provincia debe establecer sus parámetros para combatir esta modalidad. Este proyecto de ley no busca desalentar el uso de la moto como vehículo o pasatiempo, ya que "un motociclista no es un motochorro”. Se buscará la colaboración de la población en esta lucha contra los delincuentes para que quienes transiten por las calles bonaerenses no sientan más miedo cuando una moto pasa por su lado.
En distintos operativos de control, saturación y prevención se secuestraron, hasta el momento, más de 250 mil motos y fueron retenidas más de 22 mil por estar en directa vinculación con un delito, ya sea por salideras bancarias, narcomenudeo o asaltos.
El presidente de la comisión de Seguridad, Matías Ranzini
Para acompañar este trabajo se necesita una ley que permita terminar con esta modalidad delictiva. Cada municipio tiene un plazo de hasta 45 días para enviar al Ministerio de Seguridad el diseño geográfico y horarios donde son obligatorios el uso de los chalecos reglamentarios y el casco reglamentario. En caso de no hacerlo será el mismo Poder Ejecutivo Provincial quien determine esas zonas y horarios.
“A diferencia del distrito de la Ciudad de Buenos Aires, donde es todo urbano, nosotros nos tuvimos que concentrar en desarrollar un proyecto que contemple las particularidades de una provincia tan extensa y diversa, por eso cada municipio deberá elevar al Ministerio de Seguridad cuales son los perímetros geográficos y franjas horarias donde el uso de los chalecos y los cascos son obligatorios”, dijo Ranzini.