22 Marzo de 2016 18:33
El fallo de la Cámara del Crimen que ordenó que la causa por la muerte del fiscal Alberto Nisman pase a la justicia federal enumera una serie de errores garrafales que se hicieron durante la instrucción del caso, cuando estuvo en manos de la fiscal Viviana Fein.
Dos de los camaristas admitieron que Nisman podría haber sido asesinado.
La enorme cantidad de personas que hubo en el departamento. "Bastaría mencionar la gran cantidad de personas que circularon por el interior del departamento sin que una autoridad concreta las coordine".
No se preservó la escena de la muerte más allá del baño. "No cabe duda de que lo que debe entenderse por escenario del hecho debió extenderse más allá del ambiente en que fue hallado Nisman".
Se contaminó el ambiente donde se produjo la muerte. "Las imágenes obtenidas esa noche ilustran que ninguno de los peritos, ni la Dra. (fiscal Viviana) Fein al transitar por la zona, llevaban cobertor para su calzado o lo hicieron con algún tipo de prudencia".
Se perdió la posibilidad de obtener huellas o pruebas. "Permitir un acceso tan descuidado o no evacuar la escena a su arribo, significó la imposibilidad de recoger huellas dactilares, pisadas o cualquier tipo de rastro en general que facilitara el esclarecimiento del evento.
El juez Manuel de Campos no dio directivas cuando estuvo en el lugar. "Como director del proceso, ante la demora del representante del Ministerio Público, debió ponerse al frente de toda diligencia que por su urgencia evidente permitía la más correcta conservación de la prueba".
Inacción del juez, antes de la llegada de la fiscal. "El Dr. De Campos, que llegó al lugar antes que la Dra. Fein, sólo se limitó a solicitar la confección de un acta circunstanciada, cuando frente a sus ojos se estaría alterando la escena".
No se secuestraron elementos en la escena del hecho. "Durante el procedimiento inicial no se secuestró la alfombra sobre la que estaban extendidos los pies de Nisman. Tampoco un paño de color verde ubicado sobre la mesada, cuando ambos tenían evidentes rastros de sangre".
Aún no se sabe quiénes vivían en el mismo edificio de Nisman. "Todavía se ignora quiénes habitaban en el complejo Le Parc al tiempo del hecho".
La fiscal sólo buscó probar que se trató de un suicidio. "Debo dar razón a las querellas pues la premisa de investigación para el Ministerio Publico Fiscal fue sólo el suicidio, con un prejuicio que parece descartar cualquier otra posibilidad".