Se los vio entrar con sigilo, como si guardaran un secreto y a la vez buscaran un tesoro. En los pocos huecos que encontraron en su intensa agenda en China, donde el presidente Mauricio Macri y su comitiva participaron del Foro de la Franja y la Ruta para la Cooperación Internacional, algunos funcionarios visitaron el Silker Market, el famoso Mercado de la Seda de Beijing (Xiushui para los chinos, que en sus cinco plantas se confeccionan ambos, corbatas y camisas a medida en menos de 24 horas.
Fabián Perechodnik, funcionario de Vidal, también fue de compras.
La revelación la hizo Santiago Fioriti, el enviado especial de Clarín.
Macri se reunió con empresarios y con funcionarios chinos.
Mientras un miembro de la comitiva macrista se dejaba tomar las medidas por un sastre, otro miraba un catálogo de carteras Gucci y Louis Vuitton a través del Ipad que le sostenía un vendedor. Una vez elegida la cartera, el vendedor iba a un depósito y se la traía envuelta. Las carteras van de los 20 a los 50 dólares.
En exclusiva, BigBang publica la foto del funcionario bonaerense Fabián Perechodnik, el sciolista que pasó a las huestes de María Eugenia Vidal, con un envoltorio en el que llevaba el o los trajes que compró.
La duda que permanece es si las carteras eran originales o imitaciones. Según la fama que tiene el mercado de la seda, la mayoría de los productos son falsificiados.
Las carteras se exhiben en un piso completo.
“Hubo funcionarios que se llevaron hasta cinco carteras cada uno”, contó una fuente a BigBang.
“Hubo funcionarios que se llevaron hasta cinco carteras
El primer adelantado, cuenta Clarín, fue un diputado nacional, que viajó con una valija sin trajes ni corbatas. Ante la sorpresa del resto, no le quedó otra que revelar su descubrimiento: mostró un traje y contó que había encargado otros cinco. “A sólo 130 dólares (poco más de 2.000 pesos)”, les dijo. Y se lo enviaron sin costo alguno al hotel. Las camisas están 30 dólares (480 pesos).
LA FERIA, POR DENTRO
El Mercado de la Seda está situado en la Avenida Chang An, conocida como la calle de la seda. Allí, desde las 9 a las 21, trabajan cientos de comerciantes que antes ocupaban las calles con sus mantas.
La seda, la joya preciada de la zona.
Dato, empleado enigmático y descuento
Otro que aportó un dato a los ansiosos compradores, según cuenta Clarin, fue el vocero de Macri Iván Pavlovsky: "Vayan a Tony and Tony, en el tercer piso y pregunten por Peter de parte mía ", dijo y mandó por WhatsApp la foto del local, del vendedor y la ubicación. Los que fueron se encontraron con una rebaja: 100 dólares por traje.
La imponente feria de la seda. "La Salada china".
Eso no es todo: por una propina, Peter los podía poner la etiqueta, por ejemplo, de Armani. ¿Todo legal?
Los bolsos y las carteras que se ofrecen en el mercado de la seda.
En el también llamado el “templo de las imitaciones” se ofrecen carteras imitación de grandes marcas, como Gucci o Louis Vuitton, que se venden pese a estar prohibido. En 2010, durante el viaje de la por entonces presidenta Cristina Kirchner se vivió algo similar: funcionarios y legisladores se perdieron en la feria y salieron con las bolsas llenas.
George Bush padre lo visitó hace unos años. Bill Clinton también.
Las marcas (¿originales o falsificadas?) que pueden encontrarrse son Louis Vuitton, Chanel, Prada, Rolex, Omega.
En el Mercado de la seda hay 1700 locales. Es una especie de "Salada de calidad".
Una histórica de ese mercado es el regateo. Los vendedores se abalanzan sobre los turistas y pueden ofrecer sus productos hasta tres veces más caro, todo depende del regateo.
Imitación Louis Vuitton: 20 dólares.
¿Los funcionarios habrán exhibido sus dotes de negociadores o compraron a la primera oferta? Ese es otro de los secretos del viaje. Uno que no salió a la luz.