El senador nacional, Martín Lousteau, se involucró como nunca en las internas de la Unión Cívica Radical (UCR) este año. Recorrió provincias, hizo campaña, apoyo a los candidatos de su lista que disputó espacios en diferentes distritos, entre ellos la provincia de Buenos Aires y Córdoba. Estuvo presente en la victoria en la Ciudad de Buenos Aires y se lo vio remarcar varias banderas del centenario partido al cual se afilió en 2017.
El economista jugó como nunca antes. ¿El motivo? La presidencia del partido. Lousteau tiene en mente ser el sucesor del actual diputado nacional y ex gobernador de la provincia de Mendoza, Alfredo Cornejo.
Los comicios internos del centenario partido dejaron al sector que comandan Lousteau y el diputado nacional Emiliano Yacobitti como uno de los mejores posicionados para buscar la conducción del radicalismo. No solamente se trata de la forma de ampliar la injerencia de la sección Capital dentro de la UCR sino también de buscar otros objetivos.
Lousteau es, según incluso mencionan sus principales detractores dentro del partido, uno de los pocos candidatos nacionales que tiene la UCR por su nivel de instalación e imagen positiva. Si bien hay quienes le recuerdan haber sido ministros de Economía en los primeros meses de la primera presidencia de Cristina Fernández de Kirchner, el paso del tiempo y sus críticas hacia lo que vino después le permiten distanciarse de ese hecho.
Por fuera de posicionarse como dirigente de alcance nacional, Lousteau tiene otro objetivo. En las elecciones de 2019, uno de sus acuerdos con el jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, era tener despejada la Ciudad para competir por dicho cargo electivo en 2023.
Después de ese acuerdo, que BigBang contó en exclusiva, el año pasado comenzaron a aparecer varios candidatos más dentro de Juntos por el Cambio. La presidenta del PRO, Patricia Bullrich, la ex gobernadora de la provincia de Buenos Aires, María Eugenia Vidal y el ex ministro de Interior, Rogelio Frigerio entre otros.
Sin decirlo abiertamente, ante la posibilidad de que ese acuerdo no se respete y se baje a algún dirigente de peso específico para competir en una interna en la Ciudad, Lousteau coquetea con una presunta candidatura presidencial en las PASO que obligue a Rodríguez Larreta a tener que arremangarse los brazos para ser quien encabece la nómina presidencial de Juntos por el Cambio.
Para esa empresa es clave, según explican, que el senador nacional se alce con la presidencial del centenario partido. Para eso habrá que esperar a la votación del comité nacional y como juegan cada uno de los delegados que fueron elegidos en las internas partidarias. Desde el sector que compitió con Lousteau en las internas todavía no emerge un nombre.
La única certeza es que el actual titular del partido no seguirá en su cargo. Es algo que tienen definido. Aunque se mantuvo ajeno a la disputa electoral interna, Cornejo se siente más cómodo con la lógica que profesan Lousteau y Yacobitti, que quedó expresa en la negociación con el alcalde porteño ente 2015 y 2019.
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Estar dentro de Juntos por el Cambio pero manteniendo una identidad, disputando espacios de poder, pertenecer a la mesa de toma de decisiones y no ser meros acompañantes del PRO.