El jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, tiene pensada una serie de medidas complementarias a las que ya anunció el presidente Alberto Fernández en el Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU) con las nuevas restricciones, que regirán como consecuencia de la segunda ola de la pandemia el coronavirus (Covid-19).
Según trascendió, estaría en los mismos parámetros que el anterior de hace 15 días y además se reeditaría la disputa por la presencialidad en las clases. Tal y como contó BigBang, cerca del jefe de Gobierno decidieron tomas la concesión de que el nivel secundario vaya a la virtualidad. De esta manera el nivel maternal, inicial, y el primario seguirían con la presencialidad.
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Por otro lado se tiene pensado ponerle un freno a la construcción privada, salvo obras que sea de urgencia como sucedió durante el año pasado, y que las actividades profesionales independientes (abogados, contadores, arquitectos y demás) ofrezcan sus servicios de forma remota.
Por otro lado, una de las variantes que se analiza es que los comercios vuelan a tener que atender desde la calle como sucedió durante la Fase 2 de la cuarentena el año pasado. Sin embargo esto no fue confirmado del todo. No así los controles que volverán a ser rigurosos sobre todo a los sectores gastronómicos a los que se les permitirá que continúen trabajando de la misma forma.
“Hay que entender que estas son recién las primeras medidas y que no hay que generar un agotamiento total. Tenemos que ser quirúrgicos porque más adelante si se tendrán que tomar medidas más antipáticas”, agregaron.
En cuanto a las clases, la decisión también dependerá de lo que diga la Corte Suprema que se espera que se expida hoy. La extensión del DNU, tal y como anunció Fernández, dejaría habilitada la puerta para que la Ciudad decida continuar con la cautelar que tiene vigente de la Cámara de Apelaciones en lo Contencioso Administrativo, Tributario y de las Relaciones de Consumo.
“Si no es un DNU nuevo se puede aplicar el mismo concepto que antes”, agregaron cerca del alcalde porteño. Mientras tanto se espera qué dirá la Corte Suprema al respecto que, según trascendió, fallaría hoy.
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Entre las versiones que circulan, la que más fuerza tiene afirma que los ministros del máximo tribunal remarcaran que el dictado de clases, y la regulación del mismo, es una atribución provincial y no nacional por ende el Presidente se habría extralimitado en sus consideraciones con el mencionado DNU.
Pero dejará abierta la puerta a que, como se trata de una crisis sanitaria inédita, se necesitan medidas de urgencia. ¿En criollo? El máximo tribunal remarcará que es necesario que exista un dialogo, un consenso político. No por nada Fernández busca ir al Congreso para sumar nuevas atribuciones a las que ya tiene por las emergencias que declaró tanto la Cámara de Diputados como el Senado a fines de 2019.