El jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, abrió los encuentros que tendrá, de forma presencial o virtual, el jefe de Gabinete, Santiago Cafiero, para escuchar las propuestas de cada una de las provincias para apertura la cuarentena. De la reunión participó por videoconferencia el gobernador de la provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof, además de autoridades nacionales y porteñas,
Las medidas que presentó el alcalde porteño, y que contó en exclusiva BigBang el lunes, apuntan a que comiencen a operar diferentes actividades y rubros bajo protocolos de cuidado sanitario. En concreto la propuesta se centra en:
Que todos los rubros pueda trabajar bajo la modalidad “para llevar”. Permitir que funcione la construcción privada (ya que la obra pública se encargó Nación de generar protocolos para que se mantenga). Avanzar en la implementación de un sistema escalonado de uso del transporte público. Excavaciones para construccion, las empresas de mudanzas y comercios de venta al publico donde se pueda regular la distancia social.En el encuentro, el jefe de Gobierno porteño le propuso a Cafiero "mantener" la cuarentena estricta por el coronavirus en la ciudad pero en adelante con una "paulatina apertura regida por protocolos", como pide el presidente Alberto Fernández.Voceros del Gobierno porteño explicaron que está en análisis reabrir algunos rubros y actividades luego de que los "números de la última semana reflejaran una cierta estabilidad de la curva de contagios, de forma errática, pero pareja al fin".Las fuentes adelantaron que "los rubros y actividades que se están tomando en cuenta y analizando flexibilizar son de algunos comercios, con la modalidad de venta conocida como 'take away' y la construcción de obras privadas con ciertas características".
También se habló de las salidas recreativas, pero solamente para los más chicos durante los fines de semana. Las salidas podrían ser sábados o domingos, con un registro previo.
Respecto de los comercios, se aclaró que la apertura gradual sería para librerías y bazares, pero no para los textiles o de indumentaria, porque los barrios más concurridos como Once o las avenidas Santa Fe, Avellaneda o Cabildo se llenarían de gente.En ese plano, insistieron en que las medidas "están en análisis y se van a consensuar con el Gobierno nacional y el de la provincia de Buenos Aires", tal como ocurrió hoy.
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Kicillof estuvo presente en forma virtual debido a que todas esas cuestiones tienen un impacto directo en el AMBA, según explicaron.“Durante el encuentro, los funcionarios nacionales avanzaron en la agenda común en la que vienen trabajando, principalmente evaluando la situación en la zona metropolitana en lo referido al tránsito, transporte público, circulación de personas y actividades exceptuadas”, adelantaron.
Junto a Larreta y Cafiero también estuvieron el ministro del Interior, Wado de Pedro, la secretaria Legal y Técnica de Presidencia, Vilma Ibarra, y el ministro de Salud de porteño, Fernán Quirós.
En cuanto a la modalidad “para llevar”, lo que buscan implementar en la Ciudad es que todos los comercios, bares, restaurantes, casas de ropa, casas de celulares, lugares de venta de insumos deportivos, puedan armar listas de pedidos para entregar.
El protocolo, que sigue en plena etapa de definición, busca que el porteño pueda hacer el pedido, supongamos, hoy y el comerciante vea si puede permitir que lo retire mañana o pasado mañana debido a que habrá un sistema de cupos para evitar el amontonamiento de las personas.
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Con la construcción privada jugaron diferentes factores pero el principal, y por lo que se buscará que toda la cadena este habilitada, es que se trata de un rubro que genera un impacto en todos los estamentos sociales desde la clase alta hasta la baja.
Para que todo esto funcione se necesita además que haya un sistema escalonado de transporte público para evitar las “horas pico” lo que lleva al tercer punto en cuestión.