La mitad de los alumnos de escuelas primarias y secundarias de todo el país no entienden lo que leen. Esa es una de las conclusiones más preocupantes de "Aprender". La evaluación fue realizada en octubre del año pasado a 1,7 millones de chicos en 31 mil escuelas de la Argentina. Por eso, Mauricio Macri, que calificó de "dolorosos" a los resultados, prometió que el Gobierno trabajará para que "todos los chicos, nazcan donde nazcan, tengan las mismas oportunidades".
Primaria
Los alumnos tienen problemas para entender lo que leen.
Uno de cada tres alumnos de sexto grado (33,2%) tiene un nivel básico o por debajo en Lengua.
Las diferencias entre las escuelas públicas (39,1%) y privadas (16,5%) demuestran la inequidad en el acceso a la educación.
La desigualdad en la materia también se profundiza entre la ciudad (32,7%) y el campo (36,2%).
Los chicos tienen problemas para hacer cálculos.
Cuatro de cada diez alumnos de sexto grado (41,6%) tienen un nivel básico o por debajo en Matemáticas, pero las diferencias se profundizan entre las escuelas públicas (47,7%) y privadas (24,3%).
Secundaria
Existen grandes diferentes entre los ámbitos público y privado.
Casi la mitad de los de quinto y sexto año (46,4%) tienen problemas para entender lo que leen.
Las diferencias son enormes entre las escuelas públicas (53,7%) y privadas (33,0%).
La desigualdad en la materia también se profundiza entre hombres (51,0%) y mujeres (41,7%).
También entre la localización del establecimiento educativo.
Siete de cada diez alumnos de sexto grado (70,2%) tiene serias dificultades para realizar operaciones de sumas, restas, multiplicaciones y divisiones, pero las diferencias entre las escuelas urbanas (69,3%) y rurales (82,2%) demuestran la inequidad en el acceso a la educación.
El presidente dio a conocer los resultados de "Aprender".
En general, entonces, "Aprender" demostró que el sistema educativo de la Argentina, uno de los mejores del siglo pasado, ahora se encuentra en decadencia. Pero, como si fuera poco, existen profundas desigualdades entre la escuela pública y la privada y entre las urbanas y las rurales.
Por eso, el presidente reconoció que la problemática educativa le saca el sueño, pero que trabajará para "darle más oportunidades a los chicos".