El militante de izquierda Sebastián Romero, acusado de disparar una especie de mortero casero durante una marcha contra la reforma previsional que impulsaba el macrismo el 18 de diciembre de 2017, llegó hoy a la Argentina extraditado desde Uruguay, luego de estar dos años y medio prófugo. Romero llegó a las 15 al aeropuerto internacional de Ezeiza y desde allí fue trasladado a una dependencia policial para ser indagado por el juez federal Rodolfo Canicoba Corral.El juez federal Sergio Torres, ahora integrante de la Suprema Corte de Justicia Bonaerense, había dictado su captura nacional e internacional, acusándolo de "intimidación pública, daño, lesiones y resistencia a la autoridad". Romero quedará 15 días en aislamiento, en atención a los protocolos sanitarios vigentes a causa de la pandemia de Covid-19.
"No puede estar en contacto con otros detenidos, pero estará en alguna dependencia de alguna fuerza de seguridad que le permita estar aislado", dijo su abogado Martín Alderete a Télam "Legalmente en 24 o 48 horas tendría que ser indagado, con lo cual va a prestar declaración, entiendo que entre viernes y sábado. Allí veremos cuál es la acusación específica y concreta que se realiza, y a partir de eso haremos los planteos que le corresponden", informó.En abril pasado, la Cámara Federal de Casación Penal había rechazado un pedido de exención de prisión formulado por su defensa. La Sala I de la Cámara Federal de Casación Penal, integrada por los jueces Gustavo Hornos, Carlos Mahiques y Ana María Figueroa, había rechazado este recurso extraordinario presentado por la defensa de Romero, al que también se había negado el juez de primera instancia.La Cámara consideró "inadmisible" el recurso.Romero había sido precandidato a diputado nacional por el Frente de Izquierda en la provincia de Santa Fe. La fiscal Alejandra Mangano le había imputado los delitos de los cuales se lo acusa. Su foto, con rastas, lentes, remera roja y un arma de fabricación casera de muy evidente precariedad, fue objeto de todo tipo de bromas y memes. La manifestación, que congregó a decenas de miles de personas, fue duramente reprimida por la policía. Según los abogados de Romero, el "mortero" al parecer no era tal cosa, sino una rama que tenía pirotecnia Jupiter atada en la punta.
El PSTU, lel partido político en el que Romero milita, publicó un comunicado en su defensa. Allí se denuncia que "en su persona intentaron demonizar a todos los que protestamos contra el ajuste brutal que implicó la Reforma Previsional y nos defendimos de la brutal represión a la que fuimos sometidos", se define a Romero como "un preso político" y se convoca "al conjunto de las organizaciones de derechos humanos, políticos y sociales que ya se han pronunciado por su libertad a redoblar los esfuerzos en esta exigencia, solicitando al Juzgado Federal n°12, hoy a cargo del Juez Canicoba Corral y al Gobierno Nacional su inmediata libertad".