La mujer que apareció en una cámara oculta dándole 25 mil dólares al presidente de San Lorenzo, María José Scottini, rechazó las versiones de coimas y aseguró, al igual que Marcelo Moretti, que el dinero entregado fueron "donaciones" y que habrá una tercera pronto. Sobre el pedido para que fiche a su hijo, pidió que se pongan en su "lugar de mamá". "¿Qué le voy a decir al presidente cuando lo tengo enfrente? No seamos hipócritas, hablo con sinceridad", lanzó.
"Lo que pasó es lo que realmente declaró Moretti. Fue una donación. Es más, hubo una donación más y va a haber una tercera en estos días", aseguró Scottini al aire de TyC Sports. "Cuando mi hijo llega a jugar a San Lorenzo, vi el estado en el que se encontraban las canchas, los vestuarios y demás, y bueno, entre gente que somos muy fanáticos nos juntamos e hicimos una donación. Hicimos otra para el césped este año y prontamente haremos otra", remarcó.
Según detalló la mujer que también es empresaria de medios en la ciudad de La Plata, la información inclusive fue expuesta en el portal de noticias que maneja, La Plata 1. Cuando le pidieron pruebas de lo que afirma, aseguró que no las tiene encima porque se encuentra de vacaciones. "Yo lo doné, tengo el recibo de que hice una donación", confirmó, mientras que agregó que el objetivo fue mejorar "las canchas, el césped, los vestuarios". "Fue de buena voluntad lo que hicimos, no era para terminar así. Nunca fue un tema de coimas", precisó.
Al mismo tiempo, Scottini precisó que irá a la Justicia "por el buen nombre y el honor" de su hijo, Simón Coronel. Sin embargo, aseguró que el trato que tuvieron en la institución deportiva con él "fue muy bueno", al igual que la experiencia anterior en el club de sur bonaerense Lanús. "Mi hijo entrenaba con el de Moretti y ninguno de los dos jugó en todo el año, ni siquiera el hijo de Moretti jugó", sumó para correr sospechas.
Según la versión de Scottini, su pareja y representante de futbolistas, Edgardo Lemos, fue parte "del grupo que llevó a Moretti a ser presidente", y fue por eso que conocieron el lamentable estado de las instalaciones, que motivó las futuras "donaciones" a la gestión. Por otro lado, reconoció que pecó de informal tras recibir "sólo un papel" como comprobante de lo realizado.
"Quizás tendría que haberme puesto de otra manera, no lo evalué en su momento. Me dieron un comprobante y con eso me quedé tranquila", deslizó Scottini. "Me arrepiento, por ahí, de no haber tomado una precaución en su momento. De tener un escribano, un tesorero, no lo evalué. Por ahí lo hice de manera más suelta, más amena, más cordial", explicó, antes de afirmar que dejó "todo en las manos de Dios".
También se encargó de relativizar el pedido de fichado que le hizo a Moretti. "Cuando lo tuve cerca, le dije: 'Simón está entrenando, porque quedó, fichámelo'. No sé, soy mamá, pónganse en el lugar de mamá. ¿Qué le voy a decir al presidente cuando lo tengo enfrente? No seamos hipócritas, hablo con sinceridad. Después no tuve mucha comunicación durante el año. Yo tengo una familia grande, laburo todos los días como ustedes, manejo un medio en la ciudad de La Plata. No fue algo malintencionado, no voy a hacer algo que me perjudique", cerró al respecto.
Por último deslizó la sospecha sobre quién filmó la situación, en el marco de que a la reunión con Moretti ingresaron cinco personas "todas juntas". "Hay alguien que creo que su trabajo sería este", aseguró en relación a hacer cámaras ocultas. "Hay muy mala intención en todo esto, la persona que lo está haciendo sabrá por qué", cuestionó.