14 Marzo de 2018 11:00
Los obispos diocesanos ganan casi el triple que los docentes. Los datos fueron aportados por el jefe de Gabinete, Marcos Peña, en su primera exposición ante la Cámara de diputados en lo que va del año. El funcionario reveló que el Estado destinará este 2018 más de 130 millones de pesos a salarios de funcionarios de la Iglesia.
La información revelada por Peña había sido requerida por el bloque Evolución, que lidera el economista Martín Lousteau. En total, los diputados oficialistas y opositores enviaron 1.318 consultas sobre la gestión. El dato más relevante es que los obispos de mayor jerarquía para la Iglesia católica ganan por mes $46.800.
Peña reveló el sueldo de los obispos.
La cifra representa casi tres veces más que el salario promedio de un docente, que de acuerdo a cifras de septiembre pasado ganan, en promedio, $17.188 en bruto - sin los descuentos jubilatorios e impuestos -. Sin embargo, hay maestros que ganan mucho menos, dependiendo la cantidad de horas que tengan a cargo y la antigüedad.
También varían de acuerdo a la Provincia. En Santiago del Estero, por ejemplo, la cifra es más baja: $11.248 (en ese caso los obispos ganarían más del cuádruple que los maestros); mientras que en Santa Cruz ronda los $24.667 (en este caso representaría poco menos del doble).
Sin embargo, Peña agregó además que este año está previsto que el Estado destine $130.421.300 para pagar sueldos de obispos. El dato además surge en un momento en que el Gobierno atraviesa una compleja relación con la Iglesia católica, sobre todo a partir de que el presidente Mauricio Macri habilitara el debate sobre el aborto en el Congreso, a pesar de su postura en contra.
Los obispos ganan el triple que los docentes.
Lo curioso es que en todos los “escalafones” los salarios de los obispos son altos, en comparación con otras profesiones. Los obispos auxiliares y los obispos eméritos cobran $40.950 por mes; mientras que los administradores apostólicos y diocesanos perciben una cifra más alta: $46.800.
No se trata de un punto para nada menor, si se tiene en cuenta que desde hace varios años sectores de la izquierda cuestionan duramente el costo de sostener desde el Estado a la fe católica, con salarios altos y un enorme presupuesto para la Iglesia. Si el sueldo de los obispos se compara con el salario mínimo vital y móvil, de $9.500, la brecha salarial es aún mayor: cobran casi cinco veces más.