11 Abril de 2016 09:49
Construir una red nacional dirigida a la atención y el cuidado de la primera infancia fue una de las principales promesas de campaña de Mauricio Macri. Así, hoy se concretó el anuncio de la creación de 4.000 espacios en todo el país dedicados a este plan, en un acto que el presidente ofreció en el Centro de Desarrollo Infantil Chispitas, en Villa Zagala, partido bonaerense de San Martín.
"El objetivo es que dentro de cuatro años todos los niños tengan su primera oportunidad de progreso
Macri compartió unos mates con el equipo del Centro Chispitas.
Estos centros, según Macri, serán 1000 en la primera etapa y tendrán distintas características: algunos serán levantados desde cero, pero otros se montarán alrededor de organizaciones sociales ya existentes. El objetivo, es que, como expresó el mandatario, "dentro de cuatro años todos los niños tengan su primera oportunidad de progreso".
Como complemento al programa, el Gobierno encarará junto a la Fundación CONIN la construcción de 30 nuevos Espacios de Atención de Prevención para la Desnutrición y tres Espacios de Atención para casos severos en las regiones del noroeste, el noreste y Cuyo.
El presidente también jugó con los chicos luego de la presentación.
La red contará con el aporte de docentes, médicos y asistentes sociales que trabajarán en la atención alimentaria y nutricional de los niños. Chequeos y controles de salud periódicos también formarán parte de la agenda, además de actividades educativas y recreativas para estimular el desarrollo de las capacidades psicofísicas y cognitivas.
El antecedente inmediato de esta experiencia son los Centros de Primera Infancia (CPI) de la Ciudad de Buenos Aires, proyectados por Macri en su gestión como jefe de Gobierno porteño. Embarazadas, niños y niñas de 45 días a 4 años y sus familias, en situación de vulnerabilidad social, son los destinatarios de la atención que se ofrece durante ocho horas al día.
Además de ofrecer actividades de aprendizaje y estimulación temprana, los Centros preparan menúes de desayuno, almuerzo y merienda. En el ámbito psicosocial, mientras tanto, apuntan a fortalecer los vínculos familiares y brindan talleres orientados a las familias y a las mujeres embarazadas.
Este modelo está inspirado en una experiencia ya instaurada en Uruguay, donde los CPI funcionan como ambientes destinados a la protección, al cuidado y educación de niños y niñas desde los tres meses a los tres años. La atención es diaria, y la concepción detrás de estos espacios apunta a diseñar ambientes potenciadores del desarrollo a partir del ejercicio de la autonomía progresiva, construyendo ciudadanos responsables.
