09 Abril de 2017 11:07
Mauricio Macri dio su opinión sobre el asesinato de Micaela García, la joven que habría sido víctima de un violador con antecedentes y una condena a medio cumplir. "El Juez no entendió su tarea", sostuvo y agregó que ya habló con el ministro de Justicia, Germán Garavano, al respecto.
Micaela tenía 21 años.
Además, el presidente apoyó el pedido de Garavano para que el magistrado Carlos Alfredo Rossi, quien ordenó la liberación del acusado, renuncie o sea enjuiciado por el Consejo de la Magistratura.
Carlos Rossi, el juez de la discordia.
"Para que la sociedad funcione, todos tenemos que asumir nuestras responsabilidades. Un juez, cuando asume esa responsabilidad, tiene que saberlo. Está dónde está para cuidar a la sociedad y no para sostener caprichos ideológicos", afirmó Macri sobre el juez Rossi.
"Para que la sociedad funcione, todos tenemos que asumir nuestras responsabilidades.
"El sistema se equivocó o el juez no entendió la dimensión de su tarea: la vida no es algo opinable. Habrá leyes que podamos sacar pero con las leyes que tenemos debería alcanzar", agregó en una entrevista en Radio Mitre.
"El sistema se equivocó o el juez no entendió la dimensión de su tarea
LA IRA CONTRA LOS GREMIOS
Omar Viviani, jefe del gremio de taxistas tuvo un exabrupto.
A su vez, el mandatario dijo que "los gremios tienen que ser parte de la solución, no de los problemas del país", al considerar que el paro general como instrumento de protesta "ya demostró que no sirve". Como ejemplo mencionó a los repetidos paros docentes, que se llevan a cabo desde hace más de 10 años, "y no mejoró ni una variable" de la situación de la educación.
"Eso quiero para todas las escuelas del país, que hayan nacido donde hayan nacido todos los chicos tengan las mismas oportunidad", remarcó. Luego, antes de finalizar, cuestionó al jefe del gremio de taxistas Omar Viviani, quien días atrás instó a "dar vuelta los coches que salieran a trabajar en medio del paro", y lo calificó como una "patoteada" y "papelón" que no ayuda a construir el país.