Después de una semana complicada para el gobierno nacional, Mauricio Macri volvió a dar una entrevista y salió con los tapones de punta contra la oposición peronista.
En un reportaje a fondo, el jefe de Estado habló de los casos de corrupción que se le imputan, su Gobierno, Cristina, la oposición, la pobreza, la inflación y su relación con "Lilita" Carrió, entre tantas otras cosas.
Aquí, algunas de sus principales definiciones:
Es claro que el cambio es algo incómodo, porque a ellos les ha ido bien, ellos ni siquiera en muchos casos pueden justificar su patrimonio y se sienten jaqueados.
Merecemos vivir mejor, y queremos emprender una agenda que no es un cambio económico, es un cambio cultural. Claramente hay gente que siente que cada vez que avanzamos ellos se ven fuera del sistema, y la verdad que el sistema necesita renovarse.
Macri volvió a poner al kirchnerismo en el centro, como adversario principal.
Pienso que el kirchnerismo tiene la visión totalmente opuesta a la Argentina que ha comenzado, nosotros creemos totalmente lo contrario. Creo que queda claro que el kirchnerismo sistemáticamente pone palos en la rueda.
Yo valoro muchísimo lo que hacen los docentes, el problema es con un sector del gremialismo docente. Estos gremios han logrado que se privatice la educación en la provincia de Buenos Aires.
Si no tenemos mejor educación, no vamos a tener mejores empleos y no vamos a poder reducir la pobreza, y todo es parte de la misma agenda.
Yo soy el presidente que puso la verdad sobre la mesa y dijo cuántos pobres hay en la Argentina. Lo único que hicimos fue sincerar cosas que estaban ocultas. A mí la primer cosa por la que quiero que evalúen mi presidencia es si se redujo la pobreza.
Tenemos que ser capaces, tenemos que producir las cosas con la misma calidad, eficiencia y el mismo precio que Brasil y Chile. Contrariamente a lo que dicen, en 2016 se importó menos que en 2015 con el kirchnerismo.
La Argentina ha vuelto a generar más puestos de trabajo que los que se destruyen. Es un proceso de reconversión, y lo importante es que cada mes se creen más trabajos de los que se pierden. Falta muchísimo, estamos trabajando y tenemos la convicción.
El cambio es algo que incomoda, pero hay una mayoría importante que no nos vamos a resignar con los que gobernaron los últimos 30 años y ahora tienen todas las respuestas. Muchos de los que hoy opinan fueron gobierno y hoy no se hacen cargo de nada. Todos fueron funcionarios de ellos y no se hacen cargo de nada.
Lo importante es que valoremos lo que hemos logrado, en 15 meses volvimos al mundo, el mundo nos apoya en lo que hemos hecho. Es deuda, pero es un recurso que podemos usar por poco tiempo, por eso tenemos que sentarnos en una mesa y ver cómo asignamos el gasto del Estado.
Obviamente yo sabía lo del Correo, por eso pedí disculpas y asumo mi parte. Dado que en la Argentina nadie tiene un cheque en blanco, dije que tendría que haber previsto un mecanismo especial.
El Presidente habló del Correo y de su padre.
En ninguno de esos hechos ha habido corrupción, y el tiempo lo va a ir demostrando. Yo no cambié, yo soy el mismo, Dios me dio la posibilidad de renacer, y ahí me abordé el servicio público, primero con Boca y después en la Ciudad, y no tuve una sola denuncia de corrupción. Entonces, de golpe, qué pasa que en un año hacen todas denuncias de corrupción.
Yo como tengo que dar el ejemplo me presenté desde el primer día. ¿Alguien no sabía que mi padre era Franco Macri? También dije el primer día que a diferencia de las épocas pasadas, ninguno va a tener una mínima ventaja en nada, va a tener que cumplir la ley como todos los argentinos. Estamos terminando unos decretos para terminar con los conflictos de intereses, para que haya mayor transparencia, y que quede como un parámetro, como una vara.
No hay ningún delito en los Panamá Papers. Yo ni sabía que era director, y como director no tengo que declarar una sociedad, la tengo que declarar si soy dueño. Ni le pregunté a mi padre, no voy a andar discutiendo cosas de hace 20 años.
Muchas cosas que Carrió dice yo he aclarado que no estoy de acuerdo, no estoy de acuerdo con lo de mi primo, lo de Angelici, lo de Lorenzetti, pero valoro mucho la relación que hemos construido. Ella exista antes que yo estuviese en política y no la voy a cambiar, yo convivo con ella y valoro lo que hace por el país.
Tengo que decir que no hay ningún delito, ninguna cosa rara en Avianca. Cuando uno compra una empresa lo más valioso son los trabajadores, los gerentes, los administradores, no las máquinas. No hay nada raro que la misma gente haya continuada.
Este Gobierno anunció en campaña que quería una Argentina más conectada. Nosotros queremos crecer y que todas las aerolíneas que quieran venir vengan, y todos van a tener rutas, que importa si se llama Avianca, o como sea. Esta es la magia, dejar de tener un país chico y tener un país que da oportunidades. El nuevo dueño qué dice, puse 200 millones de dólares, yo que tengo que ver con las cosas que les pasan a ustedes, pero bueno, estas cosas pasan.
Nosotros no somos lo mismo, acá venimos a trabajar por ustedes, y en mi Gobierno hay un compromiso por la honestidad. No hay ninguna relación entre Arribas y Odebrecht, Arribas en el 2013 vivía en Brasil, se dedicaba a otra actividad, no creía que yo podía ganar. Fue un error gravísimo y que lleva a confusión, ni eso ni Panamá Papers, ni Avianca, ni en el Correo hay ningún hecho de corrupción. Yo voy a hacer todos los pasos que hay que hacer, porque es parte de esta etapa fundacional de la Argentina.
Yo no le mentí a nadie, yo vengo del mundo empresario y casi todos eran colegas míos. Entonces no les puedo decir a todos los que me conocen que se vayan, al contrario, los tengo que convencer de que inviertan, pero con triple filtro. Venimos de épocas donde había carpas llenas de amigos, eso se terminó, no hay ninguna ventaja por ser amigo o pariente del presidente, ese es mi compromiso y lo estoy cumpliendo.
Ernesto Sanz participa en la mesa de coordinación, pero no estamos planeando en hacer ningún cambio.
"No hay ninguna relación entre Arribas y Odebrecht", afirmó Macri.
Vamos a invitar a la CGT a dialogar de vuelta, hay mucho por mejorar, pero tenemos que sentarnos a pensar en términos del siglo XXI. Movilizarse, hacer paros, son parte de la democracia, pero yo creo en el diálogo. Los paros no van a ayudar en nada a la Argentina.
Yo no confronto directamente con Cristina, el 90 por ciento de mi tiempo ha sido destinado a construir futuro. Mi energía no está puesta en confrontar con nadie.
Daniel (Angelici) es un amigo, es presidente de Boca y tiene autonomía como tal. Yo le dije al presidente de FIFA que me deje intervenir porque era un desastre. Yo dije no me meto más, nosotros dijimos queremos intervenir con una persona del gobierno.
Yo les dije quiero un fútbol normalizado, que respete las decisiones de FIFA y que pague los impuestos. No tengo candidato, no voy a participar, es un tema institucional del fútbol argentino. El fútbol está hoy en su peor momento, espero que respete los parámetros que les hemos puesto.
Gils Carbó es una militante política. Estamos haciendo los esfuerzos políticos para lograr consensos. Es un proceso, entiendo, imagino lo que es para la gente que tiene que ir a trabajar, pero es un proceso, la Argentina no puede convivir más con el desorden y el atropello.
El Presidente volvió a criticar a la Procuradora.
Hay que entender que la forma, el lugar para resolver los problemas es en una mesa, dialogando. Tenemos que entender que con más de lo mismo la Argentina no va a salir adelante, hay algo que tenemos que cambiar. Lo primero que tenemos que cambiar es la actitud, le pido a los argentinos, especialmente a los dirigentes, es qué van a poner para sacar a la Argentina adelante.
Todos los días repaso si pude haber hecho algo más, no es fácil, no son resultados a la velocidad que uno querría. Es parte de lo que me toca hacer, porque a pesar de que toco timbres, no me alcanza para estar con todos, y esto me permite estar en sus casas diciéndoles que se puede y que no caigamos en el desánimo.