Sin lugar a dudas el audio de la escucha telefónica entre Cristina Kirchner y Oscar Parrilli quedará en el recuerdo de miles de personas. Desde el “soy yo, Cristina, pelotudo”, hasta el “andá a trabajar, querido”, para muchos son frases que demuestran un maltrato cotidiano entre la ex presidenta y sus colaboradores y funcionarios.
Lo curioso fueron dos historias que relataron hombres que supieron ser del riñón del kirchnerismo en el pasado. La semana pasada una de las anécdotas la contó el ex presidente Eduardo Duhalde, quien supo ser el jefe político de Néstor Kirchner en el pasado. La otra, la sumó ayer por la noche el sindicalista Luis Barrionuevo.
“El finado Néstor no sólo maltrataba a los secretarios, les daba trompadas”, disparó el secretario general del gremio de los gastronómicos en el programa de Mirtha Legrand. La frase provocó estupor entre los presentes. Incluso, intervino el fiscal José María Campagnoli, quien agregó, sobre la ex presidenta: “Si al jefe de Inteligencia lo trataba así, ¿qué nos queda?”.
No es la primera vez que surgen versiones sobre el maltrato que ejercía el matrimonio K desde el poder. La anécdota más llamativa la contó Duhalde la semana pasada a radio La Red. El ex presidente recordó que en una oportunidad vio cómo sacaba “a patadas” a un colaborador en la Embajada de España.
“Yo lo he visto en la Embajada de España sacar a patadas a un secretario. Y un día entró un colaborador para que firmara unos papeles y le pegó”, disparó Duhalde. Según el ex gobernador bonarense, “Néstor era aún más agresivo que Cristina”. “Es una personalidad muy especial, el maltrato es la costumbre de ellos”, manifestó.
La difusión de los audios entre Cristina y Parrilli provocó que varias personalidades que supieron tener cercanía con el matrimonio Kirchner relataran hechos agresivos. Pero no es la primera vez que esto ocurre. Años atrás fue el ex senador Eduardo Menem, hermano del ex presidente, quien habló de arrogancia, desprecio y narcisismo por parte de la ex jefa de Estado.
“La presidenta es arrogante, despreciativa y narcisista. Néstor Kirchner era patotero, agresivo y le dio mucha letra a Cristina hasta su muerte”, señaló Menem en 2013.