Finalmente, Diputados dio marcha atrás con el incremento del 47 por ciento en los salarios de los legisladores nacionales. Pasadas las 3 de la madrugada, el titular de la Cámara, Emilio Monzó, anunció que se reducirán los sueldos.
El presidente había pedido que "no se pasaran de largo" con los incrementos de Diputados y Senadores.
Ni bien comenzó la sesión, el diputado del Partido Obrero, Néstor Pitrola, había solicitado reabrir el debate sobre los salarios de los diputados. Sin embargo, su propuesta fue rechazada ampliamente por los bloques de Cambiemos, el Frente Renovador y el Bloque Justicialista. El kirchnerismo acompañó la iniciativa, que de todos modos no avanzó.
Más temprano, el presidente había pedido “no pasarse de largo” con los incrementos de sueldos que decidieron los presidentes de Diputados, Emilio Monzó; y del Senado, Gabriela Michetti. “Hay que reconocer que hubo una inflación, que hay que hacer un ajuste para ser medianamente equitativos, pero tampoco en estos momentos pasarse de largo”, sostuvo Macri desde Santa Fe.
Aunque el macrismo y un sector de la oposición habían rechazado reabrir el debate, pasadas las tres de la mañana Monzó aseguró que “en pos de mantener el prestigio de la Cámara” definió suspender la parte del aumento que corresponde a los “gastos de representación” y los montos establecidos para pasajes y desarraigo. Sin embargo, sí se mantiene el aumento en las dietas, que se ajusta de manera automática de acuerdo a la paritaria de los trabajadores parlamentarios.
La decisión de Monzó fue anunciada pasadas las tres de la madrugada, tras un intenso debate.
El titular de la Cámara destacó que la dieta de los diputados tuvo un incremento del 18 por ciento en marzo y del 13 por ciento en agosto. “Separemos los gastos, que es lo que está confundiendo y se está tergiversando”, sostuvo Monzó, quien aseguró: “Esos gastos son responsabilidad y competencia del presidente de esta Cámara, y me hago responsable de su sinceramiento, de los tramos aéreos y la representación”.
Tanto los pasajes como el desarraigo quedaron en suspenso, pero sería definido en un encuentro entre el presidente de la Cámara y los diputados. Luego de la marcha atrás, el diputado Pitrola aseguró que fue una “victoria política” de la izquierda, y sostuvo que existe “un divorcio entre los ingresos de los diputados y la realidad social que vive el pueblo trabajador”.