23 Agosto de 2016 05:05
El ministro de Justicia de la provincia de Buenos Aires, Gustavo Ferrari, denunció que más allá de las amenazas telefónicas a María Eugenia Vidal, apareció un cartucho de escopeta en el garage de la casa de Castelar en la que vivió la gobernadora hasta hace unos pocos meses.
El ministro de Justicia bonaerense confirmó las amenazas a María Eugenia Vidal.
Según Ferrari, “hay una relación entre los hechos y las decisiones políticas de Vidal de luchar contra la corrupción y las mafias”. El ministro de Justicia sostuvo por radio Continental que el cartucho de la escopeta pertenece a un calibre 16, y que fue dejado en el garage de la casa en la que Vidal vivió hasta hace unos pocos meses en la localidad bonaerense de Castelar.
La gobernadora se mudó por razones de seguridad a la Base Aérea de Morón tiempo atrás. El cartucho, según Ferrari, estaba intacto. “Es un mensaje muy claro, marca un nivel de cercanía que es muy inquietante: la reacción no se da a través de una declaración pública, se da a través de una amenaza de bomba. Es inequívoco el mensaje”, señaló el ministro de Justicia bonaerense.
Según el funcionario, anoche se registraron dos llamados telefónicos al 911 cuyo objetivo era provocar amenazas hacia la gobernadora bonaerense. El primero, pasadas las 21:03, señalaba: “Mañana les exploto todo en el edificio de Vidal”. El contenido del segundo, que según Ferrari fue a las 23, aún no se conoce. Desde el domingo por la tarde ya son tres las amenazas contra Vidal.
La gobernadora María Eugenia Vidal fue amenazada en al menos tres ocasiones en 48 horas.
El episodio más grave sería la aparición del cartucho de escopeta calibre 16 en el garage de la casa de Castelar en la que Vidal vivió junto a sus hijos y su ex pareja, el intendente de Morón, Ramiro Tagliaferro. Según detalló el ministro, el cartucho fue hallado por un empleado de una garita de seguridad que allí se encuentra. Estaba en el interior de una caja.
Los custodios oficiales no se encontraban, ya que habían partido momentáneamente a cargar combustible, según informó el ministro. Enseguida, el empleado de seguridad de una garita de la zona llamó al 911 y dio el alerta. Esa propiedad se encuentra totalmente vacía desde la mudanza de Vidal y sus hijos a la Base Aérea de Morón.
Según el ministro, las amenazas podrían provenir de sectores molestos por las diversas reformas que encaró la mandataria. Aunque evitó anticipar de dónde podrían provenir, ya que señaló que "las sospechas son difíciles de precisar", Ferrari sí habló de "intereses" que tocó Vidal: "Juego, salud, Servicio Penitenciario, Policía Bonaerense y otros bolsones de la gran corrupción".