Con el foco puesto en avanzar en un acuerdo con el peronismo K, el Congreso del Frente Renovador habilitó esta tarde por unanimidad a Sergio Massa para tejer las negociaciones de cara a una “coalición opositora amplia, para competir y ganar”. La decisión le suma aún más incertidumbre a la campaña, con la mira puesta en el 12 de junio, la fecha límite para inscribir las alianzas electorales; y al 22, el día en que cierren las listas.
La decisión fue aprobada por unanimidad en el congreso renovador que se realizó este jueves por la tarde en Parque Norte. La cumbre no fue casual: con el respaldo de dirigentes de todo el país, Massa buscó un primer acercamiento público con el kirchnerismo, mientras que avanzan las conversaciones en privado.
El acuerdo alcanzado por el Consenso tiene tres puntos claves, que son percibidos como un guiño hacia la unidad con el PJ K, que la semana anterior atrás sorprendió con la fórmula Fernández-Fernández:
“La fragmentación de la oposición beneficia únicamente a Macri y por lo tanto contribuye a su posible reelección. La geometría actual de la oposición es insuficiente para garantizar la victoria”. “La Argentina necesita una coalición opositora amplia, plural y federal para competir y ganar en las próximas elecciones”. “El Frente Renovador ratifica a Massa como su candidato y le delega la potestad de realizar las gestiones y los acuerdos que sean necesarios y oportunos para construir una coalición opositora que pueda ganarle a Macri y ser alternativa de gobierno”.En este sentido, el último puntos es claro y muy contundente: a pesar del rechazo que expresó Massa durante años hacia el kirchnerismo, buscará articular una negociación con la fórmula que liderarán Alberto Fernández y Cristina Kirchner. Pero además, hubo un condimento especial: en ningún tramo de su discurso Massa hizo referencia a sus socios de Alternativa Federal.
Días atrás, en ese espacio integrado también por Juan Schiaretti, Juan Manuel Urtubey y Miguel Pichetto acordaron ir negociar alianzas, pero con el límite puesto en la letra K. Ahora, con un discurso firmemente opositor, Massa pareció dar vuelta la fórmula y plantear que el límite es Mauricio Macri. Horas después, en Salta, Urtubey recibía la visita del presidente.
HIT DEL VERANO Y NEGOCIACIONES
Del mismo modo que el lunes en la convención de la Unión Cívica Radical, este jueves se volvió a escuchar el “hit del verano” con insultos al presidente Mauricio Macri, cuando culminó el discurso de Graciela Camaño, quien finalmente estuvo presente (en la previa hubo rumores sobre su ausencia), y que destacó la capacidad de juntarse “a pesar de las diferencias”.“Le delegamos a Massa la posibilidad de decidir qué hacer”, remarcó la diputada, que de todos modos no se ahorró un palo al kirchnerismo con una dura crítica al gobierno: “Macri es el emergente, alguien se equivocó para que este energúmeno gobierne”.
Hasta ahora, las negociaciones entre el kirchnerismo y el massismo eran subterráneas, en privado. De hecho, el propio Massa negó haber conversado con Alberto Fernández, quien la semana pasada dijo que había charlado por teléfono con el tigrense. Un intendente del PJ decía a BigBang que con Massa en el espacio, la fórmula Fernández-Fernández ganaría sin problemas: “Sería un jaque mate”, lo definía.
Lo concreto es que los ofrecimientos fueron múltiples: desde competir en una PASO dentro del PJ, hasta una candidatura en la Provincia, donde esta semana se lanzó la fórmula Axel Kicillof-Verónica Magario. Hay quienes piensan en el Frente Renovador que esa fórmula aún no está cerrada y que podría cambiar. Un guiño de Massa fue claro en su cumbre de Parque Norte: "El próximo gobierno va a necesitar un acuerdo social; estoy para liderar o empujar el carro desde donde sea".
Pero en el PJ, también hay quienes se imaginan dentro del peronismo a Massa como primer candidato a diputado nacional y presidir la Cámara baja: “Sergio es un hábil negociador, podría ocupar muy bien ese rol”, agregaba otro jefe comunal consultado por BigBang.
A su vez, hay quienes lo imaginan integrando un “gabinete de unidad”. Por lo bajo, un diputado cercano a Massa hoy deslizaba a este medio una definición política clave: “Salvo que algunos sectores se empeñen, tenemos que terminar en un gran frente con el peronismo”.