El rumor comenzó hace más de una década y nunca más paró, impulsado siempre por sectores opositores a los gobiernos de Néstor y Cristina Kirchner. Y estaba vinculado al día a día de Máximo, el mayor de los hijos, y su relación con los videojuegos, puntualmente con la PlayStation.
La chicana tomó impulso e inclusive ya está instalada como si fuera real. Tanto es así que en más de una ocasión lo han consultado al propio Máximo al respecto y lanzó una ironía, al definirse como un “modesto jugador”. Pero ahora, fue más allá y contó cómo y cuándo fue que empezó a utilizar las consolas de videojuegos.
A pesar del “mito” que se conformó alrededor del supuesto fanatismo de Máximo, el rumor siempre fue negado con vehemencia. Inclusive, tiempo atrás, el Frente para la Victoria desmintió una noticia que aseguraba que el diputado había solicitado en su despacho un Smart TV de 52 pulgadas, un equipo de Home Theatre y una consola PlayStation PS4.
El diputado habló sobre el mito de su fanatismo por los videojuegos.
En una entrevista con radio Tiempo FM, Máximo aseguró horas atrás: “Yo jugaba con él (por Néstor Kirchner). No recuerdo si era la ColecoVision o el Atari, que eran bastante precarios en ese momento, y la pasábamos muy bien. Compartíamos muy buenos momentos”.
"Cuando uno ahora ingresa a muchas casas encuentra Play Stations y otras cosas que yo desconocía que existían, estoy bastante atrasado en ese rubro, pero me parece bárbaro que los hijos lo compartan con padres, que lo compartan entre amigos, amigos bastante grandes, y armen torneos", agregó el diputado.
Máximo, en el recinto.
EL MITO DEL JOYSTICK EN EL TECHO
En febrero del año pasado, luego de llevar a cabo un relevamiento por cada rincón de la Quinta de Olivos, el Gobierno filtró que en uno de los techos de la habitación en la que dormía Máximo se encontró un joystick de PlayStation. Eso, claro, despertó dudas acerca de cómo habría llegado hasta allí el aparato electrónico.