11 Mayo de 2018 14:21
“Hoy ganó la certeza de que podemos cambiar la historia para siempre”. Con esas palabras, un extasiado Mauricio Macri celebraba el 22 de octubre la victoria electoral de Cambiemos en distritos clave del país. Ocho días más tarde, reunía a opositores, jueces y sindicalistas en el CCK para anunciar una serie de “consensos básicos” y reformas en el Estado. Aún emocionado por el resultado electoral, aseguraba: “Somos la generación que está cambiando la Argentina para siempre”.
Aunque pasaron solo seis meses, hoy ese panorama parece haber quedado mucho más atrás en el tiempo y todas las encuestas marcan la fuerte caída no solo en la imagen del Presidente, sino también en las expectativas económicas a futuro. Desde diciembre, la mirada sobre la gestión y sobre Macri descendió entre 10 y 25 puntos, de acuerdo con diversos relevamientos.
Consultados por BigBang, varios encuestadores que realizaron estudios en los últimos días coinciden en que la estrepitosa caída que se inició a fin de año y continúa hoy es impulsada por al menos cuatro factores, todos vinculados a la economía: la reforma previsional, los tarifazos en transporte y servicios, la fuerte suba del dólar y el acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI).
De diciembre a mayo, Macri cayó más de 20 puntos.
Lejos parece haber quedado aquel 9 de marzo en el que Cambiemos puso en marcha el operativo reelección. “Hoy está todo entre paréntesis. El Gobierno agrava la situación día a día, pero tiene la suerte de que la oposición no logra construir un discurso alternativo”, analizó el consultor Hugo Haime.
El estudio más reciente de Gustavo Córdoba & Asociados es mucho más catastrófico. Marca que un 63,5 % desaprueba la gestión de Macri, y que desde diciembre cayó un 25 %. Sólo en los primeros días de este mes cayó 7,4 por ciento. Apenas el 34,2 por ciento respalda al Gobierno, y solo un 36,7 % considera como positiva la imagen del Presidente. Y lo que es peor: casi el 70 por ciento tiene expectativas negativas respecto del país de acá a un año.
El Gobierno cuenta con una ventaja: una oposición dispersa que a pesar de algunos guiños de unidad no logra emerger con un candidato que en 2019 pueda hacerle frente a Cambiemos. La desventaja es que cada vez más votantes creen que la situación económica empeoró respecto al pasado reciente, y que poco a poco se demuestra un viejo concepto de la política Argentina: que se vota con el bolsillo.
El último informe de Management & Fit, la consultora de Mariel Fornoni y Guillermo Seita, apunta que un 63,6 % considera que la situación está peor o mucho per que hace un año. Apenas un 18,1 % considera que está “mejor” o “mucho mejor”.
Fuente: Marketing & Estadistica - Termometro Nacional de Opinión Pública,
“El único pico importante que tuvo Macri fue en octubre del año pasado, cuando llegó al 62 por ciento. En diciembre bajó a 52. Por la inflación y los tarifazos bajó aún más. La semana pasada estaba con 37 puntos a nivel nacional”, consideró en diálogo con BigBang la consultora Analía Del Franco. “Hay desilusión e incertidumbre por la inflación, pero también hay temor”, señaló.
Fuente: Management & Fit.
“Hubo un sutil cambio de desilusión o pesimismo, a bronca o enojo. Macri cayó desde diciembre cerca de 25 puntos. La mitad fue de diciembre a abril y otro 12,5 de abril a mayo, solo en un mes, hay una aceleración, la caída es sostenida”, consideró Córdoba. “El Gobierno interpretó el resultado de las elecciones como un cheque en blanco”, agregó en diálogo con BigBang.
EL EFECTO VIDAL
El impacto negativo sobre Macri tuvo su efecto de arrastre sobre la gobernadora bonaerense, María Eugenia Vidal, cuya imagen también cayó, aunque en menor medida, en las últimas semanas. Ese es uno de los puntos que, si las elecciones fueran hoy, pondría en riesgo el plan de reelecciones que anticipó Horacio Rodríguez Larreta unos meses atrás, cuando dijo que lo más natural sería que en 2019 busquen ser reelectos Macri, Vidal y él.
La imagen de Vidal también cotiza a la baja.
La gobernadora, sin embargo, es la única que no dijo con todas las letras que sería candidata. En parte, porque la batalla electoral en la Provincia es mucho más incierta que en la Ciudad o incluso a nivel país. Pero además, cerca de la gobernadora creen que dar un mensaje de tono electoral no caería para nada bien entre los electores.
Córdoba estimó en su último estudio que la imagen de Vidal cayó del 64,9 % en diciembre, a 49,8 % la semana pasada. Según Haime, hay un “cuestionamiento a la dirigencia en general”. “La única que sube es Cristina, estaba en 40 puntos de imagen positiva, este mes dio 45. Pero un 55 % tiene una imagen negativa. Le sirve el silencio”, agregó. Para Management & Fit, el 45,3 % desaprueba la gestión de Vidal.