Por estas horas, en el Gobierno Nacional se juega una pulseada fundamental por el fin de dos medidas que entraron en vigencia con el comienzo de la pandemia de coronavirus en Argentina, cuando muchos empresarios optaron por echar o suspender a sus empleados: la prohibición de despidos y la doble indemnización.
Más allá de ambos decretos firmados por el presidente de la Nación, Alberto Fernández, en marzo de 2020, desde el sector privado hicieron y deshicieron a su antojo, ante un pasivo Ministerio de Trabajo a cargo de Claudio Moroni, y ante la atenta mirada de la lenta Justicia laboral.
Casi un año y medio después del inicio de esas medidas, y con una cantidad inquietante de trabajadores que sufrieron la pérdida de sus fuentes laborales en medio del Aislamiento Social, Preventivo y Obligatorio, Moroni dejó en evidencia sus contradicciones durante un acto con ministro de Educación, Jaime Perczyk, el presidente de Techint, Paolo Rocca, y el titular de la UIA, Daniel Funes de Rioja, con la excusa del relanzamiento del Departamento de Educación y Formación Profesional de la Unión Industrial Argentina (UIA).
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Cabe recordar que a comienzos de la pandemia, Moroni y Rocca tuvieron un breve enfrentamiento cuando el empresario echó a miles de trabajadores, sin respetar la prohibición de despidos y mucho menos la conciliación obligatoria dictada de manera virtual por la cartera de Trabajo. Unos meses después, Rocca pagó indeminizaciones sin ningún tipo de multa por parte del Estado.
Hoy el ministro y el empresario compartieron el encuentro, en donde Moroni afirmó: “La economía crecerá 10% este año, con lo cual volverá a los niveles previos a la pandemia de Covid-19. Eso significa que vamos a recuperar todo el empleo perdido durante la pandemia”.
Y agregó: “Cuando podamos medir la situación de diciembre próximo, que la publicaremos en febrero, vamos a haber recuperado la totalidad del empleo perdido durante la pandemia, como mínimo. Hay sectores, como la manufactura y la construcción, que están arriba de los empleos que tenían antes de la pandemia".
Además, Moroni dijo sobre las cualidades de los trabajadores en la actualidad: “Los puestos de trabajo requieren cada vez más habilidades y el desafío es cómo dotar a la gente de esas habilidades. Por ello, la educación profesional no puede ser un remedo de la educación formal", y evaluó que "replicar un esquema rígido en la educación profesional, lleva a repetir los problemas de siempre".
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En ese sentido, destacó: “El desafío es cómo validar y certificar estas múltiples formas de transmisión de conocimiento. Otro desafío es reconocer las habilidades adquiridas en los lugares de trabajo. Para eso es preciso trabajar en la empleabilidad, en la formación”.
Y finalizó: “Si no se acompaña todo esto con un proyecto de desarrollo, y vamos a un proyecto de desaparición de la industria y de las empresas, entonces se conduce al vacío. Esto requiere además de estos detalles, un proyecto político de desarrollo legitimado por todos. Me preocupa a veces, cuando se vuelve a ideas que mostraron que no sirvieron para el desarrollo", señaló Moroni.
Por su parte, en representación del sector privado, Rocca aseguró: “Hay un consenso total sobre la educación" entre los privados y el Estado, porque afirmó que "la educación transforma las sociedades, los individuos, y es el factor esencial para permitir la movilidad social. El progreso civil económico y social de una comunidad está estrictamente relacionado con la educación, pero en particular con la educación técnica", porque puntualizó que "la educación técnica enseña a comprender la realidad".
Luego, Moroni deslizó que el 31 de diciembre podría no renovarse la prohibición de despidos y la doble indemnización, ambas medidas tomadas al inicio de la pandemia de Covid-19. El funcionario señaló que la situación actual del país es distinta, teniendo en cuenta la apertura de actividades, destacó que la Argentina está creciendo al 9% y reconoció que en este contexto podrían no renovarse dos de las medidas más cuestionadas tanto por los empresarios, como por el Fondo Monetario Internacional. Desde varios sectores del Frente de Todos, señalaron que dicha medida está vinculada a un pedido del Fondo Monetario Internacional para sellar el acuerdo por la deuda.