El Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA) se prepara para los cambios significativos en las tarifas de trenes y colectivos a partir del mes de febrero, luego del anuncio y la promesa cumplida del presidente Javier Milei, quien publicó la suba a través de la Resolución 1/2024, publicada este viernes en el Boletín Oficial, que establece la apertura de la instancia de participación ciudadana en el marco de los aumentos de tarifas del transporte de jurisdicción nacional.
La propuesta tarifaria supone un nuevo cuadro que refleja un aumento considerable y acumulado al mes de enero, debido a la reducción del subsidio; de esta forma, el boleto de colectivo partirá desde $270, mientras que el de tren se fijará en $130, con vigencia a partir de febrero y tendrá una implementación gradual: la primera sección del colectivo, que abarca de 0 a 3 kilómetros, tendrá un aumento sustancial, pasando de $76,92 a $270. Las demás secciones también seguirán esta tendencia, marcando un cambio significativo en el costo del transporte público en la región.
Sin embargo, hubo muchas inconsistencias dentro del discurso del presidente libertario, quien primero había anunciado durante los debates que iba a subir el transporte público e iba a sacar todos los subsidios, pero cuando el ex ministro de Economía, Sergio Massa, ordenó fijar el monto estimativo dentro de las tarifas de la sube, Milei y compañía salieron a denunciar persecución política y adoctrinamiento por parte de los dirigentes hacia el electorado.
Milei no sabe cuánto sale un pasaje
En medio de la discusión por el aumento de tarifas de colectivos, subtes y trenes, justo antes de asumir, la ex secretaria de Gestión de Transporte, Jimena López, lanzó fuertes críticas contra el ahora presidente, ya que desconocía en absoluto cómo se compone el subsidio y cómo funciona el Estado en ese contexto.
En este sentido, la ex funcionaria decidió hacer un desglose absoluto sobre la falta de interés del libertario sobre la materia de transporte -debido a que, solo para empezar, no sabía cuánto se pagaba un pasaje de colectivo- y remarcó que el 85% del subsidio proviene del aporte del Estado nacional, el 14% de la recaudación del boleto y el 1% específicamente de un fondo de gasoil.
"Los 700 pesos que se conocen como tarifa no subsidiada salen de un cuadro de costos que tiene que ver con kilómetros, gomas, desgaste de la unidad, tiene una composición de diferentes ítems que se suman y que da un costo de boleto para el subgrupo dos en CABA y AMBA, y en trenes tiene la misma composición", señaló López a Télam aquella vez.
"Creo que (Milei) dejó a las claras que no tiene ni idea y que es un producto justamente del marketing o del coacheo político, pero de lo que es la política pública sabe muy poco", finalizó.
Ante estas críticas, desde La Libertad Avanza salieron a defender a Milei y fue el mismo ex candidato a Jefe de Gobierno Ramiro Marra quien habló en relación a esto en Radio la Red: "Cada uno toma sus decisiones mucho más allá de a quién vota o deja de votar, están discriminando por el voto (...) es un acto de populismo barato que quieren hacer, patético, a tan pocos días de una elección", aunque aclaró: "Por supuesto que no tiene que existir ningún tipo de subsidio. Lo que pasa es que, lamentablemente, la situación que estamos viviendo en la Argentina... Tenés que arreglar todas las circunstancias que van pasando", enfatizó.
La propuesta de Milei y la controversia sobre las tarifas: Que sí, que no, sin subsidio viajo yo
Luego de haber asumido la presidencia, el líder de La Libertad Avanza respondió a todas las críticas por parte de la (ahora) oposición y reafirmó la propuesta que había dejado olvidada en un cajón antes del 19 de noviembre, ya que había escondido esta posibilidad bajo la alfombra. Sin embargo, esta vez asegura que se implementará una quita de subsidios y una recomposición tarifaria pero de forma gradual, "Será de acuerdo con la mejora de los ingresos", estimó.
Aunque desmintió en su momento las afirmaciones del ex ministro de Economía Sergio Massa sobre unas tarifas exorbitantes, lo cierto es que aumentará el transporte público de forma escalonada y, para aquellos que no registren su SUBE, se les cobrará exactamente el doble.
Además, el Jefe de Estado manifestó que el impacto del ajuste recaerá en el sector público y en las empresas, pero busca aliviar a estas últimas sin afectar a los consumidores y pidió "no trasladarle los problemas a la gente", pese a que ahora, con la suba de tarifas en enero y una falta absoluta por parte de las empresas de generar aumentos de sueldo, el desfasaje se hace cada vez mayor. Entonces, el ajuste no lo paga la casta sino la clase trabajadora.