06 Septiembre de 2016 17:21
El 12 de agosto pasado, el presidente Mauricio Macri y la gobernadora bonaerense María Eugenia Vidal vivieron uno de los episodios más duros desde que llegaron al poder: fueron apedreados por un grupo de personas luego de un acto oficial en Mar del Plata.
La causa por la investigación del incidente quedó a cargo del juez federal marplatense Alfredo López, quien en una entrevista realizada en Radio Mitre sostuvo que la agresión al Presidente era parte de “un plan sistemático de desestabilización” e involucró en el mismo a los dirigentes K Guillermo Moreno, Luis D'Elia, Fernando Esteche y Hebe de Bonafini.
El juez federal marplatense Alfredo Moreno, encargado de la causa de la pedreada a Macri y a Vidal
Estas palabras no pasaron desapercibidas para el ex Secretario de Comercio kirchnerista, Guillermo Moreno, quien sostuvo que nunca llamó a una rebelión contra el Gobierno de Mauricio Macri y denunció por mal desempeño ante el Consejo de la Magistratura al juez López.
Según la presentación a la que accedió DyN, Moreno trató a López de "desequilibrado magistrado" por haber asegurado que la agresión con pedradas al jefe de Estado fue "el punto culminante" de la incentivación a la violencia que comenzó con "declaraciones de Moreno, de Bonafini y de D'Elía".
Moreno trató de "desequilibrado" al juez que lo involucró en el escrache con piedras a Macri
Moreno advirtió que "temerariamente y sin ningún sustento probatorio en sus manos el desequilibrado magistrado me involucró temerariamente (sic) en un plan sistemático de desestabilización atribuyéndome falsamente haber realizado declaraciones públicas instando a la sedición, rebelión y derrocar al gobierno constitucional”.
Las palabras del juez que afectaron a Moreno
“Como hubo antes un plan sistemático de saqueo, ahora hay un plan sistemático de desestabilización. No lo digo por una opinión subjetiva sino porque los hechos están a la vista. Usted sabe las declaraciones públicas de Moreno, Esteche, D'Elía, Bonafini instando a la sedición, rebelión y a derrocar al gobierno constitucional”, había dicho el juez en la entrevista realizada en Mitre.
En esa misma noche, el magistrado también sostuvo que la que está detrás del “plan desestabilizador” es la ex presidenta Cristina Fernández de Kirchner: "¿Usted escuchó a la jefa de esta agrupación (en referencia a CFK) desautorizarlos? ¿Usted la escuchó condenar o repudiar o hacer alguna mención respecto de la agresión al presidente y gobernadora constitucionales?", argumentó.
“La gravedad de tal acusación impertinente impone esta presentación en el Consejo”, dijo Moreno en referencia a la acusación del juez marplatense.
“Pues más allá de estas declaraciones que me atribuyen nunca existieron, ni he instado nunca a la sedición, la rebelión o derrocar a ningún gobierno constitucional como peronista que soy respetuoso de la voluntad popular, es obligación de todo magistrado del Poder Judicial de la Nación, abstenerse de concretar actos ofensivos al decoro de la función judicial y al respeto de las instituciones democráticas o que comprometan la dignidad del cargo”, concluyó su alegato el ex Secretario de Comercio.
Contra los fiscales pidiendo ayuda de la gente
Esta semana, el juez López amenazó con renunciar a la causa de la agresión a Macri y a Vidal si la ciudadanía no lo apoyaba en una marcha que se realizará los próximos días para respaldar su trabajo.
El juez López también acusa a la Procuradora GIls Carbó de entorpecer la investigación de la agresión a Macri y a Vidal
El juez denunció además a los fiscales federales Daniel Adler, Laura Mazzaferri y Nicolás Czizik, encargados de investigar la pedreada a Macri y a Vidal, por supuesto "incumplimiento de deberes de funcionario público" y por entorpecer la causa. Inclusive, López afirmó que una fiscal, Laura Mazzaferri, es afín a la Procuradora Alejandra Gils Carbó, designada en ese puesto por CFK.
