José Pedraza, el sindicalista de la Unión Ferroviaria que fuera condenado a 15 años de prisión como autor intelectual y partícipe necesario del asesinato del militante del Partido Obrero Mariano Ferreyra, murió anoche en la clínica Agote, en Capital. Pedraza tenía 75 años y gozaba de prisión domiciliaria por razones de salud. Llevaba un mes en estado de coma.
Había nacido en 1943 en Deán Funes, Córdoba. Sus orígenes como sindicalista fueron combativos: tras una breve militancia de izquierda se incorporó al peronismo y sus primeros pasos como militante gremial estuvieron vinculados a la CGT de los Argentinos que dirigía Raimundo Ongaro. Entonces fue preso por luchar contra la dictadura de Juan Carlos Onganía.
También durante la última dictadura, estuvo enrolado en el llamado "Grupo de los 25", que realizó el histórico paro nacional de 1979, la primera medida de protesta contra la dictadura de Videla. En 1985 ganó las elecciones de su gremio y durante el gobierno menemista hizo gala de un viraje ideológico notable, y a la vez muy conveniente para sus negocios. Mientras su gremio respaldaba la política de "Ramal que para, ramal que cierra", que dejó a miles de ferroviarios en la calle, la Unión Ferroviaria se quedó con la concesión del Ferrocarril Belgrano Cargas, lo que convirtió a Pedraza a su vez en representante gremial y patrón de sus representados: la presidenta del Belgrano Cargas era su propia esposa, Graciela Coria.
Mariano Ferreyra.
Acusado de negociados diversos -entre ellos un desfalco de millones de pesos al fondo de sepelios de su gremio- Pedraza escribió la página más negra de su historia cuando el 23 de octubre de 2010 una patota de su gremio y enviada por él mismo atacó a un grupo de trabajadores tercerizados que cortaban las vías del ferrocarril Roca exigiendo el pase a planta permanente. Los hechos ocurrieron entre la estación de Avellaneda y la estación Hipólito Yrigoyen. Algunos de los patoteros estaban armados: uno de ellos, Cristian Favale, disparó la bala que mató a Mariano Ferreyra. Favale ni siquiera pertenecía al gremio: había sido contratado por Pedraza junto a otros matones para desalojar las vías como fuera, incluso asesinando gente.