Los últimos días del año podrían traer una mala noticia para los trabajadores que esperan con ansias el aguinaldo. La AFIP expuso el tratamiento impositivo que tiene este plus que reciben aquellos empleados en relación de dependencia y que las empresas deberán pagar en los próximos días.
Si bien el impacto de los descuentos debería atenuarse, ya que de acuerdo a la ley aprobada en diciembre del año pasado el pago de Ganancias del aguinaldo se prorratea durante todo el año con anticipos mensuales, no todos los empleadores se adecuaron a la nueva norma y muchos trabajadores en relación de dependencia sufrirán fuertes descuentos. En otras palabras, se le descontará todo lo que no se quitó durante el año laboral.
El impuesto a las ganancias podría abarcar el aguinaldo.
A su vez, el ente recaudador estima que para 2018, el salario más bajo alcanzado por el impuesto a las ganancias será casi un 29% superior al de este año. Así, pagarán este impuesto quienes tengan un sueldo de $ 29.900 (netos) o $ 36.000 (bruto).
En el caso de los asalariados que apliquen deducciones por cónyuge (no deben tener ingresos o, de tenerlos, estos deben ser muy bajos) y dos hijos, el salario más bajo sujeto al impuesto sería de alrededor de $ 39.500 (neto) o de $ 47.600 (monto bruto).
Los argentinos esperan con ansias el aguinaldo.
En diciembre de 2016 el Congreso aprobó la ley 27.346, que dispone que, a partir de 2018, las variables que definen quiénes pagan Ganancias y cuánto tributan se ajustarán según la variación que haya tenido el índice de la Remuneración Imponible Promedio de los Trabajadores Estables (Ripte) entre octubre de un año y octubre del año siguiente.
Si se confirma que la suba de las variables de Ganancias serán cercanas al 29 por ciento, quienes hayan tenido una recomposición salarial inferior a esa cifra, tendrán entonces una menor presión fiscal.