Después de la polémica entrevista en la que apoyó a Fernando Iglesias tras el misógino ataque que el diputado nacional y precandidato por la Ciudad llevó adelante contra Florencia Peña, María Eugenia Vidal redactó un comunicado al que tuvo acceso en exclusiva BigBang en el que interpeló a su compañero de fórmula: "No comparto la forma en la que se refirió Fernando Iglesias a las mujeres en sus tweets".
"Queremos una sociedad que siga avanzando hacia formas más equitativas y, para eso, tenemos que cuidar las expresiones. Creo que es importante que no se corra el foco de la discusión que es el gobierno nacional creyéndose una vez más por sobre la ley y organizando encuentros violando su propio DNU en plena cuarentena", cerró el escueto comunicado de la precandidata.
Según el entorno de Vidal, la defensa que llevó adelante en el ciclo de Romina Manguel "la agarró por sorpresa". "María Eugenia está todo el día en la calle, en los barrios; estamos en campaña. No sabe lo que pasa en la tele, la agarró desprevenida", reconocen, al tiempo que señalan: "Está hecha un fuego, pero no puede salir así por la televisión. Tendrá esa charla puertas adentro".
Hoy por la mañana hubo un encuentro que nucleó a muchas de las referentes femeninas del partido opositor. "Estaban todas indignadas por el ataque de Fernando Iglesias", señalan quienes estuvieron presentes. Según pudo reconstruir, Iglesias se vio obligado a "pedir disculpas internamente". "Incluso se comprometió a borrar el tweet, sobre todo por respeto a las mujeres del espacio". Algo que no sucedió, dado que sigue en el time line del diputado.
Como cabeza de lista y con todo el desgaste interno que generó el armado, Vidal siente que no puede "pedir la cabeza" de Iglesias, hombre de Patricia Bullrich y Mauricio Macri. "Horacio (por Rodríguez Larreta) tampoco puede salir a hacerlo", insisten. ¿No habrá repudio del partido, entonces? Algo similar al silencio de radio que generaron las denuncias por abuso sexual que recibió José Alperovich, a quien hace sólo un mes el Senado le extendió hasta el mes de diciembre su licencia.
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Según pudo saber este medio, las principales cabezas armadoras del viejo Juntos por el Cambio esperan ahora que sean los radicales quienes le den la "estocada final" al diputado que busca renovar su banca en estas elecciones y evitar así el desgaste lógico que generará la respuesta que, saben, recibirán por parte de los "halcones".
Las "palomas" no descartan que sea Elisa Carrió o el propio Martín Lousteau los que salgan en las próximas horas al cruce del diputado y exijan ya de forma pública su renuncia a la candidatura; aunque por el momento ninguno de los dos "lo tiene en agenda", tal y como pudo chequear este medio.