Es común escuchar entre los analistas políticos que marzo será el mes en el que los sectores de clase media que aún apoyan a Javier Milei, comiencen a soltarle la mano. Esa tendencia está a punto de ponerse a prueba con la llegada del comienzo de clases y los desbocados aumentos que habrá en los próximos días. La espera y la tolerancia ante la falta de resultados positivos para los sectores menos pudientes de la economía nacional, podría terminarse rápidamente en caso de ser así.
Durante este mes que recién comenzó habrá muchos incrementos en los precios, mientras que los salarios se quedan atrás y los ofrecimientos de las patronales en las paritarias de la mayoría de los rubros parecen irrisorios en comparación a estos. En ese sentido es que también en este periodo se vuelven a pagar las cuotas de los colegios privados.
Estas subirán entre un 40 y un 50 por ciento, de acuerdo a la zona. Si bien en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (CABA) se estima que estarán en un 40, mientras más se avanza hacia el conurbano bonaerense estos precios crecen un poco más. A esto hay que sumarle los incrementos en los uniformes de cada institución y los desopilantes crecimientos en los precios de los útiles y repuestos escolares, que ya fueron noticia durante las últimas semanas de febrero.
Los alquileres también prometen ser uno de los rubros que más duro aprieten. Si bien todavía habrá contratos que se firmaron cuando la Ley de Alquileres estaba vigente, y que estarán limitados por esta legislación, los nuevos acuerdos sin este control, amenazan con tener aumentos descontrolados que prometen dejar chiquito al 165,5 anual que establecía la norma.
Es que, más allá de las legislaciones vigentes o no, la liberación de precios que promovió el oficialismo de La Libertad Avanza (LLA) hizo que la inflación desde la asunción ronde alrededor del 50 por ciento, según las optimistas estadísticas que ofreció el Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (INDEC).
En ese sentido es que las prepagas también marcaron su propia escala. En marzo los aumentos serán del 23 por ciento, aunque la de febrero fue del 26 y la de enero del 30. Esto significa que en total en este trimestre desde que Milei es presidente, llegó al 79 total. Esto inclusive ha generado que muchos usuarios de este tipo de cobertura médica decidan volver al sistema público.
En una entrevista con Brotes Verdes, el dueño de Swiss Medical Group, Claudio Belocopitt, se refirió al lugar que apuntan este tipo de empresas. "Esto no es la papa, que lo consume el 100 por ciento de la población. Esto es un segmento destinado al segmento de la población más acomodado. Esta es la realidad", reconoció, en una declaración que recordó a cuando en tiempos de macrismo el "te hicieron creer que" se transformó en una consigna del ajuste.
Desde este último viernes que arrancó marzo, los combustibles volvieron a aumentar, entre un 4,4 y 2,7 por ciento. Esto llevó a que cada litro de nafta crezca en 32,63 pesos y en 21,12 en lo que es el gasoil. La crisis es tal que desde días antes las colas en las estaciones de servicio denotaron la diferencia que hace en el bolsillo de la clase media ese "pequeño" porcentaje.
Probablemente el rubro que más pique en punta de todos sea el de la energía eléctrica, las cuales llegarán a crecer en un 150 por ciento. "En términos absolutos, considerando un consumo promedio de 380 KV/h por mes, en el caso de los usuarios N1, una factura de 13.900 pesos pasará a pagar 34.332", comunicaron a mediados de febrero desde la Secretaría de Energía.
Las empleadas domésticas también tendrán su merecido aumento salarial, que según lo que acordó la Comisión de Trabajo en Casas Particulares, será del 35 por ciento respecto a diciembre, en una cuota de 20 en febrero y otra del 15 en marzo. Si bien este incremento golpeará a la clase media, la paritaria del sector quedó por detrás de la inflación anual, ya que fue del 154 por ciento contra el 211,4 que registró el INDEC.
Los taxis también tendrán su rol entre los gastos de la clase media, que suele usar este tipo de servicios. En la CABA, la bajada de bandera será de 854 pesos y cada ficha de 85,40. Aunque estos precios corresponden al día, ya que después de las 22 las tarifas crecen y estarán en 1.025 y 102,50 correspondientemente. A esto habrá que sumarle los peajes, que durante marzo crecerán en un 35 por ciento más que el 50 que se logró desde diciembre a febrero.
El bolsillo de la clase media argentina comenzó a sentir el ajuste. Ahora habrá que ver el efecto que tendrá sobre la paciencia a un gobierno que desde que comenzó no tuvo una buena noticia para los sectores que trabajan, y que se enfrentó contra gobernadores, diputados, sindicatos y todo tipo de minorías. Las cacerolas -vacías- utilizadas para protestar pueden volver a cumplir un rol fundamental en el futuro político del país.