La relación entre la ministra de Seguridad de la Nación, Sabina Frederic, y su par de la provincia de Buenos Aires, Sergio Berni, se encuentra en el momento de mayor tensión desde el 10 de diciembre: críticas cruzadas, pases de factura y hasta la intervención del presidente Alberto Fernández y del gobernador, Axel Kicillof. La interna tiene todos los condimentos pero poco se conoce del detonante final. Aquí te contamos cuál fue el episodio que hizo que se llegue a lo que, por ahora, parece un punto de no retorno.
El fin de semana del 25 de enero fue particularmente “movido” en la ciudad balnearia de Mar del Plata por la cantidad de jóvenes que se encontraban allí. Es que en un mismo día confluyeron recitales de Divididos, del Dj Claptone, de Damas Gratis a lo que se le sumaron varias fiestas privadas y los tradicionales boliches de la temporada como es el caso de Bruto, Ananá y demás. Eso hizo que ese fin de semana particularmente haya 150.000 jóvenes cuando la media es de 45.000.
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“Había tres veces más de lo habitual por esas convocatorias y se notó en algunos precios. Por ejemplo, se vendió un vuelo desde Buenos Aires en $52.000; una habitación normal se pagó $45.000”, remarcó una fuente al tanto de la situación para graficar el movimiento que hubo. Otro dato no menor es que ese fin de semana hubo 80 ambulancias en Mar del Plata cuando el municipio sólo cuenta con 8 del SAME.Ante ese panorama el intendente de Mar del Plata, Guillermo Montenegro, se contactó con Berni. Según pudo reconstruir BigBang, le explicó el estado de situación, le pidió refuerzos en la seguridad sobre todo debido a que ambos procuraban que no se repita el escenario que sucedió en Villa Gesell con el crimen de Fernando Baéz Sosa.
Ahí fue cuando el ministro de Seguridad provincial se contactó con su par de Nación para solicitarle el apoyo. “Después de lo que pasó en Villa Gesell, hay que estar en todo muy de cerca. Y es una preocupación”, agregó una fuente al tanto de las negociaciones. Frederic habría prometido el envío de agentes para asegurar refuerzos para que no suceda nada sin embargo nunca llegaron.
El viernes mismo, Berni tuvo que salir a armar un operativo de seguridad con los recursos que tenía a mano. Incluso la misma noche del sábado se lo vio ir y venir desde Villa Gesell a Mar del Plata para supervisar todos los movimientos. Cerca de Frederic sostienen que esa promesa nunca se realizó; incluso cerca de la cartera nacional remarcan que no buscarán confrontar con Berni.
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Sin embargo el jueves ambos se verán las caras en la primer reunión del Consejo de Seguridad Interior en Tucumán. La presencia de ambos está confirmada, según pudo saber este medio e incluso habrá foto entre ambos.No obstante ello, cada día crece más el descontento en la Casa Rosada por la falta de control sobre Berni. Es que el propio ministro de Seguridad remarca que su única jefa política es la vicepresidenta Cristina Fernandez de Kirchner; él no le responde ni a Fernández, ni a Kicillof. A eso se le suma que tiene un perfil más alto, con mayor presencia en los medios, y procura estar sobre todos los operativos medianos y grandes de la Policía Bonaerense, algo que hacía de forma habitual con la Federal y la Gendarmería cuando era secretario de Seguridad.
“Esa forma de ser hace que tenga el respaldo de la mayoría de los intendentes fuertes de la provincia de Buenos Aires”, le dijo a BigBang un jefe comunal del Frente de Todos en el conurbano.