Por estas horas, el Hotel Libertador se parece más a un polvorín que a un cuartel en donde el ejército de La Libertad Avanza diagrama sus próximos pasos. Tras el triunfo de Javier Milei en el ballotage, el armado de su flamante gabinete recibió cambios de último momento. Tras la decisión de nombrar a Luis "Toto" Caputo, en ministro de Mauricio Macri, como titular del Minister de Economía de La Libertad Avanza, fueron eyectados los ideólogos de la dolarización y destrucción del Banco Central, Emilio Ocampo y Carlos Rodríguez. Pero no es la única interna. A ella se sumó la baja de Carolina Píparo de Anses por pedido de Sandra Pettovello. Ahora el otro frente de batalla lo abrió la vicepresidenta Victoria Villarruel.
Y, por supuesto, esa dura interna la causó la decisión de Macri, quien desde el lejano medio oriente, donde busca capitales para Boca Juniors, se ocupó de coparle el Gobierno a Milei. Y lo hace con todo el poder. Por eso, a Caputo se le sumó otra figura del PRO: Patricia Bullrich. La ex candidata a presidenta que salió tercera en las generales lejos del libertario y aún más lejos de Sergio Massa, ahora tendrá un rol central en el Gobierno libertario y volverá a ser ministra de Seguridad.
Con las incorporaciónes del "Messi de las finanzas" y creador de las Leliqs, que ahora se ocuparía de desmontarlas, y Bullrich, que tuvo un paso muy polémico en Seguridad y Milei la llamó "montonera tirabombas" hace semanas, Villarruel estalló. Es que la defensora de genocidas quería tener un doble papel en su debut en la política nacional. Pretendía ser vicepresidenta y también quedar al frente del Ministerio de Seguridad. Ese sueño se derrumbó con el nombramiento de Bullrich.
La otra pata que le interesaba a Villarruel era el Ministerio de Defensa. ¿El plan? Tomar apoyo dentro de las Fuerzas Armadas y luego buscar la defensa judicial para liberar a los genocidas y cómplices sentenciados por delitos de lesa humanidad. Además, pretendía que dicho Ministerio sea ofrecido a aquellos militares que mostraron su apoyo a ella. Pero, como dijo Macri hace unos años "pasaron cosas" y Villarruel perdió todo. Por eso, se peleó con Karina Milei, la hermana del presidente electo.
Es que a la futura Secretaria de Legal y Técnica y hermana de Milei no le gustó para nada los últimos movimientos que realizó Victoria durante los últimos días de campaña. Tanto mostrarse en una marcha con banderas que llevaban su nombre en plena avenida Santa Fe como las pegatinas que se desplegaron en los alrededores del hotel tras el triunfo en las urnas. "Vos no podés hacer lo que se te ocurra", le dijo Karina a Villarruel, que le respondió: "Puedo hacer lo que quiera". Ese ida y vuelta, sentenció la abrupta salida de Villarruel de Seguridad.
A eso se sumó Carlos Kikuchi, el armador de La Libertad Avanza, que le fue a reclamar a Milei que le dieran cargos a los militantes que se sumaron desde el comienzo y explicó: "Ellos se merecen un reconocimiento porque están desde el primer momento. Ellos nos dieron los votos". Fue en ese momento, Guillermo Francos, lo cortó en seco: "Acá el único que tiene votos es Javier". Entonces Kikuchi le gritó: "Sos un arribista de última hora" y se fue. Fue ahí que Karina Milei lo calmó pero le dijo que no le darían cargos a nadie. Francos le agradeció ese apoyo y le prometió traer más ex funcionarios de Macri. La casta que La Libertad Avanza prometió eliminar se sumó a su partido político.