28 Diciembre de 2016 15:15
Tiempo de cambios en el gabinete nacional. El jefe de Gabinete, Marcos Peña, tuvo que salir hoy a respaldar al Procurador del Tesoro, el radical Carlos Balbín, luego de la ola de rumores que daban cuenta de un posible alejamiento.
Balbín tiene una rara habilidad: es amigo de Elisa Carrió y a la vez tiene vínculo con Daniel “el tano” Angelici. Dos en uno. Y dos enemigos en uno.
Lilita lo elogia y él suele decir que cultiva una larga relación con ella. En especial, dado que Balbín es uno de los hombres que más sabe de derecho administrativo del país.
Carlos Balbín, el Procurador del Tesoro.
En cambio el Procurador del Tesoro acostumbra a negar su vínculo con el presidente de Boca. En el macrismo se ríen: nadie en la justicia porteña, y menos aún un camarista, desconoce a Angelici. Mucho menos Balbín: desde 2008 que estableció un buen vínculo con el "tano", no sólo por el pasado radical compartido, sino como uno de los interlocutores clave con el PRO y con el propio Mauricio Macri.
Desmentida
Como sea, Peña elogió hoy, tras una reunión del “gabinete jurídico”, “el compromiso y la honestidad” en Balbín, y también “la transformación que ha venido encarando en la Procuración”.
El comunicado oficial de Presidencia buscó así despejar los rumores sobre el posible alejamiento del ex camarista del fuero contencioso administrativo de la Ciudad.
Carrió y Angelici, los enemigos íntimos que respaldan a Balbín.
Balbín participó de una reunión en Casa Rosada con el vicejefe de Gabinete Mario Quintana y el ministro de Justicia y Derechos Humanos, Germán Garavano, el jefe de asesores de la Presidencia, José Torello, y el representante en el Parlasur, Fabián “Pepín” Rodríguez Simón.
La excusa: analizar el plan del año que viene de la Procuración que maneja el radical. Sin embargo, y a pesar de que prácticamente no se lo vio en fotos oficiales con las máximas autoridades del Gobierno, Balbín pudo tener un respiro en medio de las versiones.