Los gritos que se oyeron durante la rueda de prensa que ofreció el jefe de Gobierno, Jorge Macri, tras desalojar una feria ilegal en el ingreso del Barrio Padre Carlos Mugica (Barrio 31) y la Terminal de ómnibus de Retiro, fueron la antesala a una sorprendente situación. Entre los pies de los periodistas presentes, una rata comenzó a circular hasta que fue pateada por alguien y luego devorada por dos perros callejeros.
Casi que no había terminado el caos que se presentó en el lugar, que Macri aprovechó la volteada para seguir hablando con los medios y dejar un mensaje: "Apareció una rata. ¿Nos abrimos un poquito? Ordenemos lo que desordenó la rata". Lo cierto es que lo pegado que utilizó el artículo que antecedió al nombre del animal, tuvo un evidente doble sentido.
Cabe recordar que los opositores y detractores del ex jefe de Gobierno Horacio Rodríguez Larreta, solían llamarlo despectivamente de esa manera: Larrata. Así sonó la pronunciación del actual mandatario porteño. Esto se resignifica aún más en el marco de la explosiva interna del PRO que durante el año pasado enfrentó al precandidato que perdió la interna con Mauricio Macri, y ahora hace lo propio con el ex presidente y la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich.
El ex presidente de Boca Juniors no bancó para nada a Larreta en su aventura de campaña presidencial y optó por la vencedora de la interna de Juntos por el Cambio (JxC). En todo ese lapso, la relación entre ambos se debilitó y dio por tierra los años en los que él fue su jefe de Gabinete y principal ladero.
El desalojo había comenzado durante la madrugada y, según la gestión porteña, se dio alrededor del "plan de reordenamiento del espacio público para mejorar la seguridad y la convivencia".
"La Feria Informal Perette tenía una extensión de aproximadamente 300 metros y funcionaban más de 600 puestos donde se vendían todo tipo de productos, de procedencia desconocida. Se vendía mucho material del bronce robado en distintos barrios y también bicicletas y pertenencias robadas a los vecinos del Barrio Mugica", aseguraron desde el Gobierno porteño.
Por otro lado, aseguraron que la demanda del cierre del espacio vino como conclusión de la reuniones que mantuvieron con vecinos en 2023 en el Centro de Gestión Participativa del Barrio Mugica, donde manifestaron que el espacio representaba inseguridad para ellos y también para los turistas que frecuentan las terminales cercanas.
Tras el desalojo, el Gobierno de la Ciudad comenzó las tareas de limpieza con el fin de recuperar el espacio y poner en valor las cuadras que hasta ayer estaban ocupadas. Para la tarea utilizaron once camiones, compactadoras, ocho palas mecánicas y diez grúas e hidrolavadoras.