Mientras desde el oficialismo de La Libertad Avanza (LLA) se desviven para lograr que el proyecto conocido como Ley Bases tenga la aprobación de la Cámara Alta, la paritaria de los trabajadores del Honorable Congreso de la Nación llevó el sueldo de los senadores a más de 8 millones de pesos netos, de los cuales quedarán en mano más de cinco para cada legislador. Fue a partir de un alza del 2 por ciento correspondiente a abril y otra del 7 desde mayo, que estuvo firmada por los representantes de cada bloque.
"En virtud de la responsabilidad política, los signatarios del presente acuerdo en representación de la parte empleadora se comprometen a otorgarlo en función de la disponibilidad en las partes presupuestarias, impulsando las diligencias necesarias ante las presidencias de ambas cámaras", establece el artículo 2 de la resolución que oficializó el aumento y que está firmada por los representantes de todas las fuerzas políticas y los representantes de los empleados legislativos.
El incremento también afecta a los números de las dietas que perciben las y los legisladores. Por un lado, sumaron una a las 12 anuales, en calidad de aguinaldo. Ahora cada una de estas serán de 4.000 módulos, de los cuales 2.500 son los habituales, hay 1.000 adicionales y 500 correspondientes a desarraigo, que sólo cuatro de los 72 senadores no cobran. Cada uno de estos módulos es equivalente a 1.800 pesos, por lo que la totalidad es de 7.200.000.
El aumentazo que deja sueldos -y dietas- de privilegio para los y las senadoras nacionales se da en el marco de una cruenta negociación para que se apruebe la Ley Bases, un proyecto con el que el oficialismo puso todos los huevos en una sola canasta cargada de reformas políticas, impositivas, diplomáticas y de todo tipo. Sería la primera ley que la nueva gestión que asumió el país el 10 de diciembre de 2023 logra imponer.
No tan lejos en el tiempo, en abril de 2023, se había dado una situación similar en la cual los senadores habían votado el alza. En aquel momento hasta el mismísimo presidente Javier Milei puso el grito en el cielo y se pronunció en contra de la medida cuando en sus redes le dedicó una publicación en la que escribió: "Así se mueve la casta".
El hecho no salió de la dialéctica de X (ex Twitter) y de las palabras pronunciadas, ya que en los hechos había sido el sanjuanino de LLA Bruno Olivera Lucero uno de los firmantes que respaldó el aumento. Otra de las personas que dejó en offside al mandatario fue la vicepresidenta Victoria Villarruel, cuando dio su versión de lo que había sucedido y expuso el aval oficialista que existió a la medida.
"Claro que hay limitaciones. Esto es una democracia. Si quieren que me comporte como una dictadora no lo voy a hacer. Las reglas son estas y todos los bloques estuvieron de acuerdo", respondió en aquella oportunidad, incómoda por las acusaciones de casta que caían sobre ella y su entorno. Además reveló que no se votó de forma nominal "porque se debe solicitar expresamente y ningún senador lo hizo", lo que también expuso a Olivera Lucero.