María Eugenia Vidal arrancó el último mes del año con una foto que le permite, una vez más, proyectar su importancia a nivel nacional.
La gobernadora bonaerense cerró la paritaria 2017 con la mayor parte de los gremios estatales con un aumento del 18%.
Como un espejo refractario de aquel Daniel Scioli que se demoraba medio año en acordar un incremento salarial con los sindicatos, Vidal primereó a todos y se convirtió en la protagonista del día.
Junto a su ministro de Economía Hernán Lacunza y a su ministro de Trabajo Marcelo Villegas, la mandataria bonaerense anunció esta tarde un aumento en cuatro tramos de 4,5% cada uno para los trabajadores estatales comprendidos en la Ley 10.430.
Vidal y sus ministros con los dirigentes de seis gremios estatales. Todo sonrisas.
El acuerdo en la Provincia tiene componentes que son emblemáticos del nuevo tiempo que pretende el gobierno nacional. Por primera vez, se acuerda un porcentaje en relación a la inflación futura -la que el oficialismo dibuja como su meta para 2017- y se admite además la indexación de los salarios.
"Demostramos que el conflicto no siempre es el mejor camino para llegar a un acuerdo, que el diálogo persistente y sentarnos a la mesa una y otra vez es el camino que valoramos y en el que creemos", sostuvo la gobernadora.
Vidal destacó que "en estas Fiestas, miles de familias en la Provincia van a tener la tranquilidad no sólo de saber cómo cierra su paritaria este año sino de contar con la tranquilidad de que van a cobrar sus salarios y aguinaldos".
Vidal hoy con Macri en la provincia. La gobernadora es el alfil del presidente.
La paritaria del 18% en cuatro cuotas está casi 20 puntos por debajo de las que firmaron este año los gremios más poderosos (como Bancarios, Aceiteros) y de la inflación con la que Cambiemos cierra su primer año en el poder.
Por eso, para la Casa Rosada la foto del día es todo ganancia y el ministro de Trabajo Jorge Triaca intentará llevar a la práctica el mismo acuerdo a nivel nacional.
La gobernadora logró resolver la pauta salarial antes de 2017 pero también dejó abierta la posibilidad -por primera vez en muchos años- de reabrir la paritaria. "Se cerró de manera anual pero queda sujeto a discusiones si la inflación fuera mayor, garantizando que ningún trabajador pierda su poder adquisitivo", dijo.
La estructura que planteó el gobierno bonaerense para 70% de los gremios estatales (no para los docentes ni para los judiciales aún) no deja de tener sus riesgos, ya que si hay que pagar de más por la cláusula, una provincia "quebrada" no podría hacerlo sin la asistencia nacional.
Habrá que ver qué pasa con las réplicas provinciales y privadas que llegarán de ahora en más. Pero Vidal y Macri hoy dieron el primer paso para resolver la puja distributiva en un año decisivo, el de las primeras elecciones con Cambiemos en el poder.