Más allá de las definiciones políticas que puedan llegar a dejar, el encuentro entre intendentes, diputados y senadores del PJ que se reunieron en la noche del miércoles en el marco de la Comisión de Acción Política partidaria, tuvo un condimento particular que para muchos pasó casi inadvertido.
Con el foco puesto en dos aspectos, ayer un grupo de intendentes y dirigentes del peronismo se reunió por la noche en busca de un mensaje de unidad. Sobre la mesa, entre disputas electorales y protagonismos políticos, hubo un detalle llamativo. Alejados del clásico choripán peronista tan criticado por Cambiemos meses atrás, esta vez la elección culinaria fue otra.
Alrededor de la extensa mesa se ubicaron varios dirigentes justicialistas, entre quienes se destacaron la intendenta de La Matanza, Verónica Magario, su antecesor, Fernando Espinoza, los randazzistas Fernando “Chino” Navarro y Julián Domínguez y los cristinistas Wado De Pedro y Axel Kicillof.
El encuentro reunión a dirigentes del PJ cercanos a Cristina Kirchner y también a Randazzo.
En el centro de la mesa, unos cuantos pequeños platos. El menú de los intendentes fue más light: en lugar del choripán, esta vez eligieron pequeños sándwiches de miga, incluso algunos con pan de salvado. La compañía, un poco más pesada, eran medialunas y masitas secas. Sobre la extensa mesa se vieron varios termos de mate, jarras con bebida y pequeñas botellas de vidrio con agua.
Entre platos y comida, tres posturas quedaron plasmadas en la sede de la calle Matheu que tiene el PJ. Quienes respaldan la candidatura de Florencio Randazzo insistieron en disputar la candidatura en una primaria, mientras que un importante sector de intendentes respaldó una lista de unidad peronista con Cristina como candidata.
En el centro, Fernando Espinoza, el jefe del PJ Bonaerense. Atrás, Verónica Magario.
Sin embargo, hubo un pequeño grupo de intendentes, sindicalistas y referentes de movimientos sociales que no descartaron una unidad del Justicialismo, pero sin poner nombres concretos. Esa tercera posición, más moderada, apunta a que la discusión continúe hasta ponerle un fin a las divisiones internas dentro del partido.
Con el 24 de junio como fecha límite para presentar candidaturas y alianzas, la disputa al interior del justicialismo parece no tener freno. Antes y después del encuentro entre sándwiches y masitas de ayer por la noche, en el sector de Randazzo insisten en presentarse a internas. Mientras tanto, continúan las negociaciones contrarreloj entre los más cercanos a la ex presidenta, con el objetivo de avanzar en una lista de unidad.