La convocatoria que comenzó el martes a la noche en las afueras del Congreso para apoyar o repudiar la legalización del aborto, tuvo y tiene presente otro reclamo que se coló en las calles a través de los pañuelos naranjas.
Cientos de personas se presentaron frente al Congreso con el pañuelo naranja.
Aunque sobre la avenida Rivadavia se ubican todos aquellos que están a favor del proyecto que los Senadores debaten desde hace horas en el recinto, del otro lado están las personas que piensan que esta medida va en contra de las dos vidas, por lo que con su presencia le reclaman a los legisladores que no aprueben la ley.
Sin embargo, a pesar de que hay dos bandos muy claros, dentro del lado "verde" aparecieron hoy también aquellos que reclaman con su pañuelo naranja la separación de la Iglesia y el Estado.
Esta campaña busca la separación de la Iglesia y el Estado.
La "Campaña Nacional por un Estado Laico" comenzó después de que en Diputados se le diera en junio la media sanción al proyecto del aborto. Este avance de los políticos logró que muchos se aventuraran a pensar que varias cosas pueden cambiar en la Argentina, por lo que se desató la idea de que es posible conseguir un Estado verdaderamente laico.
Una de las primeras famosas que vistieron de naranja públicamente fueron Catherine Fulop y la actriz Verónica Illias, quienes se presentaron en el programa de Andy Kusnetzoff con el pañuelo en su muñeca y aprovecharon el momento para explicar de qué se trataba.
Las primeras actices en usar el pañuelo naranja fueron Catherine Fulop y Verónica Illias.
Ahora, en esta oportunidad el naranja se coló en el reclamo por la despenalización del aborto, y muchas jóvenes aparecieron en la marcha con pins, remeras, cintas, pañuelos y hasta carteles que dicen “Iglesia y Estado, asuntos separados".
Mientras que los más jóvenes sostiene que esta es la "lucha que viene", desde el Facebook oficial de la campaña explicaron que promueven un Estado laico para evitar los gastos que genera la Iglesia.
"El debate por el financiamiento de la Iglesia católica se intensificó este año luego de que el Jefe de Gabinete Marcos Peña afirmara que durante el año 2018 el Estado nacional dedicará más de $ 130 millones a pagar sueldos de obispos cuyo ingreso mensual es de hasta $ 46.800. El Estado argentino está obligado por la Constitución Nacional a sostener 'el culto católico apostólico romano', lo que define que, aunque el Estado sea laico y garantice la libertad de culto, existe una responsabilidad estatal por cuidar de las necesidades de la iglesia", aclararon.