Lázaro Báez recibió ayer la visita de un grupo de Trabajo sobre la Detención Arbitraria de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) quienes se interiorizaron sobre el estado de salud del empresario y conocieron las condiciones en las que pasa sus días en el penal de Ezeiza.
Báez recibió la visita de un grupo de la ONU.
Durante la visita, que se prolongó durante unos 40 minutos, los delegados del organismo se mostraron interesados en conocer si Báez podría acreditar una hoja de ruta de vuelo en caso de que la Justicia le conceda el beneficio de la excarcelación.
Otros tiempos. Báez se sube a una de sus aeronaves privadas para viajar a Bs. As.
¿Por qué la ONU se mostró interesada en este detalle? El Juez Sebastián Casanello rechazó los pedidos de excarcelación del dueño de Austral Construcciones luego de que la Policía Federal le informó que no habían podido acceder a la hoja de ruta del avión privado con el que Báez viajó desde Río Gallegos hasta San Fernando, donde fue detenido en abril de 2016.
El magistrado consideró en aquel momento que con los medios económicos de Báez, existía peligro de fuga, por lo que rechazó los pedidos de la defensa del hombre acusado de lavado de dinero, pese a que los abogados presentaron el recorrido de la aeronave.
Casanello le niega la excarcelación al empresario.
Ahora la defensa de Báez y los representantes de la ONU mantendrán una nueva reunión para conocer en detalle el documento de vuelo y no se descarta que el organismo internacional efectúe una presentación por “detención arbitraria”.
Además, los delegados conocieron el delicado estado de salud del empresario, quien fue internado de urgencia en el sanatorio Los Arcos semanas atrás por una arritmia cardíaca. Báez sufre además hipertensión, diabetes tipo II y asma bronquial por lo que debe seguir una estricta dieta alimentaria y realizar ejercicio físico, algo que nunca hace ya que pocas veces abandona su celda en la que suele leer y analizar el estado de la causa.
Maximiliano Rusconi, abogado del empresario, se encontrará mañana con el grupo de trabajo de la ONU para entregarles la denuncia que se formuló ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, organismo al que se le solicitó un veedor internacional para que intervenga en el caso.