Parecía acorralado, pero logró el apoyo de los gobernadores, recuperó aire y ganó tiempo. La presión del Poder Ejecutivo sobre los gobernadores le pondría un freno a la ofensiva opositora para sancionar los cambios a la ley del impuesto a las Ganancias tal cual lo aprobó la Cámara de Diputados.
Los impulsores del proyecto en Diputados lo reconocen: la iniciativa acordada entre Sergio Massa, el kirchnerismo y el progresismo no alcanzaba las firmas necesarias para conseguir dictamen de mayoría en la Comisión de Presupuesto y Hacienda, que esta mañana comenzó a discutir la iniciativa. La noticia fue confirmada poco después de las 18: no hubo dictamen, no se tratará el proyecto mañana miércoles. De esa manera, el Gobierno ganaría una semana, al menos, vital para consensuar un nuevo proyecto.
En ese plazo entraría a tallar con más peso la llamada "mesa de diálogo", con integrantes del legislativo, gobernadores, la CGT y otros miembros.
Esta tarde, los jefes de los bloques del Senado acordaron con el presidente Provisional del Senado, Federico Pinedo, pedirle al presidente de la Nación, Mauricio Macri, que convoque a una reunión con la oposición, los sindicatos y los gobernadores para redactar un nuevo proyecto de reforma al Impuesto a las Ganancias.
Cobos, Daer y Moyano en el Senado.
Día movido
Desde muy temprano el Gobierno mostró los números del impacto de las modificaciones en cada provincia. ¿Sirvió? Es muy probable. Pero, en ese caso, ¿por qué no se hizo antes? Hoy, como contó BigBang, seis gobernadores -Morales, Urtubey, Schiaretti, Gutiérrez, Bertone y Weretilneck- advirtieron que el proyecto aprobado en Diputados va a desfinanciar a las provincias. Sólo Das Neves anunció el respaldo de sus senadores.
Los principales dirigentes de la Confederación General del Trabajo (CGT), por su parte, anunciaron su apoyo al proyecto de ley que modifica las escalas del Impuesto a las Ganancias que llegó de Diputados.