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La patria no se vende

Postales del paro: de la Prefectura piquetera, al nuevo papelón de Patricia Bullrich

El transcurso de la movilización y la huelga inmortalizó muchos momentos insólitos y un operativo desmedido que terminó rompiendo más el protocolo que los manifestantes.

24 Enero de 2024 15:51
El despliegue policial para que la marcha no avance .

Pese a un operativo enorme comandado por la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, para evitar la masividad de la movilización y el acto que ofreció la conducción de la Confederación General del Trabajo (CGT) en el Congreso Nacional, en el marco del paro general del 24 de enero, la medida de fuerza fue un éxito. Como resultado quedaron cientos de postales que ofrecieron las fuerzas represivas, quienes cortaron más las calles y atentaron contra el protocolo que lleva el nombre de la funcionaria, más que los mismísimos manifestantes.

Quizás la más emblemática de las imágenes la dejó la Prefectura Naval Argentina (PNA), cuando se la vio al trote yendo a cortar el Puente Pueyrredón, ese lugar que quedó inmortalizado por los asesinatos de Maximiliano Kosteki y Dario Santillán, en junio de 2002. Los efectivos se apuraron para llegar antes que quienes querían cruzarlo para ir al acto. Mientras que algunos lo lograron, otros quedaron atrás. Los gritos de "¿por qué se ponen contra el pueblo? Nosotros luchamos por ustedes también", también resignificaron la escena.

Los piquetes en los accesos, esta vez también los hicieron las fuerzas de seguridad. La Gendarmería Nacional hizo lo propio en la autopista Panamericana, donde requisó vehículos en busca de manifestantes. La Policía de Seguridad Aeroportuaria también lo hizo en Richieri y General Paz, donde hasta desplegó un camión hidrante.

Todas estas acciones atentaron directamente contra el fallo del juez federal Ernestro Kreplak, quien dio lugar a un habeas corpus particular y prohibió que, en el marco del paro general, las fuerzas de seguridad pudieran filmar, detener, demorar a quienes fueran a manifestarse. A su vez, todos los operativos fueron bajo orden de la ministra Bullrich.

El papelón de la funcionaria que tiene protocolo antipiquetes con nombre propio, no se quedó ahí. A pocos minutos del inicio de la medida, quiso ir a reflejar cómo seguían abiertos los comercios de ropa de Nazca y Avellaneda, en el barrio porteño de Flores, aunque terminó evidenciando la efectividad del paro, cuando en la hora en la que habitualmente no se puede caminar por allí, había muy pocos transeúntes. 

Lo cierto es que la medida de fuerza fue más que contundente. Las imágenes que se vieron en el Congreso Nacional graficaron eso. La columna de Camioneros, siempre masiva en todos los actos de este tipo, fue sólo un ejemplo del éxito de la convocatoria.

Allí estaba Pablo Moyano, quien dejó una frase que quedará para el recuerdo, cuando le preguntaron respecto a las críticas de su hermano Facundo, quien había dicho que el paro debía haber sido antes. "Yo de la farándula no opino", sentenció el gremialista, en un claro ninguneo al ex diputado nacional con quien comparte a Hugo como padre.

Otra escena enternecedora de la tarde la dieron las Madres de Plaza de Mayo Línea Fundadora, con Taty Almeida y Nora Cortiñas a la cabeza. Quienes se movilizaron se acercaron a solidarizarse con ellas, mientras se acercaban a la cita en una camioneta blanca, con una bandera con la consigna "30 mil detenidos desaparecidos presentes". Al vehículo lo rodeaba una seguridad compuesta por trabajadores del Sindicato de Telecomunicaciones FOETRA.

La creatividad de quienes pararon se reflejó en los muñecos inspirados en el presidente Javier Milei, que abundaron en el Congreso. Esta es una práctica habitual en cualquier protesta contra el Poder Ejecutivo. Lo que es inédito es que estén a 44 días de su asunción, al igual que el primer paro general recibido en su contra. La obsesión para que pasen el DNU y la Ley Ómnibus están debilitándolo más rápido de lo que él mismo cree.